Hace poco contábamos que la estrategia internacional de Iberdrola se había revelado como crucial en el buen desempeño de la compañía, pese a las difíciles circunstancias del mercado eléctrico. Los resultados trimestrales hechos públicos el miércoles por la eléctrica, así como las reacciones del mercado a los mismos, avalan esta postura, con las inversiones transatlánticas y británicas haciendo virguerías por los balances de la firma presidida por Ignacio Sánchez Galán.
Iberdrola obtuvo un beneficio neto de 2.760 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que representa un incremento del 85,8% con respecto a los 1.485 millones de euros del mismo periodo de 2023. En este incremento han sido clave las plusvalías millonarias registradas con la venta de activos en México.
La gestora de inversiones Renta 4 considera que este reporte «recoge de manera extraordinaria los efectos positivos de las plusvalías por la venta de los activos de México», aunque matiza que, incluso sin dichos efectos, «las cifras seguirían estando por encima de las expectativas […], lo que los lleva a revisar al alza la guía de beneficio neto para el conjunto de 2024». Por consiguiente, eleva el crecimiento previsto para la eléctrica, excluyendo plusvalías, «a dígito alto simple, desde el dígito medio simple (de 5% a 7%) que dieron en febrero».
IBERDROLA RECOGE LOS FRUTOS DE SUS NEGOCIOS AMERICANOS Y BRITÁNICOS
A finales de febrero, Iberdrola cerró en México la venta de 13 centrales de generación con una capacidad instalada de 8.539 megavatios (MW), de los que el 99% corresponde a ciclos combinados de gas y el 87% a plantas que operan bajo el régimen de Productor Independiente de Energía, contratadas con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) del país norteamericano.
Las plusvalías derivadas de esta operación ascienden a 1.100 millones de euros, según detalló la compañía en su Capital Markets Day. Estas ganancias serán destinadas a medidas de crecimiento, una decisión que responde al hambre inversor que ha caracterizado a Iberdrola en los últimos años. Sus resultados 2023 reflejan un récord en inversiones brutas: alcanzaron la marca de 11.382 millones de euros, con un crecimiento del 6,0% frente a 2022.
Por otra parte, la recuperación del déficit en el negocio comercial del Reino Unido tuvo un impacto positivo de de 238 millones de euros en los balances de Iberdrola. «Además de los efectos positivos por el comportamiento de las divisas, se observa buena evolución operativa del conjunto de los negocios, mayor base de activos regulados, mejores tarifas en Reino Unido, EEUU y Brasil, así como una mayor producción renovable y una mayor contribución de la actividad comercial», continúa Renta 4.
«El negocio de producción y clientes DE iBERDROLA se ve favorecido en España por la mayor producción renovable, que conlleva menores aprovisionamientos, pese a los menores precios»
Renta 4
Estos factores, unidos a la mejora de los márgenes y al récord alcanzado de producción renovable en los últimos 10 años en la Península Ibérica, impulsaron el resultado bruto de explotación (Ebitda) hasta los 5.857 millones de euros a cierre de marzo, un 44,1% más que en el mismo periodo del año pasado. Excluyendo la plusvalía de México y la recuperación del déficit de tarifa del Reino Unido, el Ebitda de Iberdrola crece un 10%, hasta los 4.140 millones de euros.
En redes, el análisis destaca la «mayor contribución de la transmisión por mayores tarifas y la mayor base de activos en Reino Unido», así como «la mayor contribución de los rate cases en Estados Unidos y las mejores tarifas en Brasil».
Las cifras de la eléctrica se vieron impulsadas en los tres primeros meses del año por unas inversiones brutas que alcanzaron la cifra de 2.382 millones de euros, un 36% más, con un crecimiento del negocio de redes del 27%, hasta los 1.213 millones de euros. La inversión se destinó en un 60% a distribución y un 40% a transmisión.
A lo largo del año, la compañía seguirá avanzando en su estrategia en eólica marina con la entrada en servicio de tres proyectos: St. Brieuc (Francia); Vineyard Wind 1 (EEUU) y Baltic Eagle (Alemania)
Por su parte, la inversión en el negocio renovable se impulsó más de un 50%, hasta los 994 millones de euros, de los que 366 millones de euros se dirigieron a la eólica marina (un 70% más).
A lo largo del año, la compañía seguirá avanzando en su estrategia en eólica marina con la entrada en servicio de tres proyectos: St. Brieuc, de 500 MW, en Francia; Vineyard Wind 1 (800 MW, EEUU) y Baltic Eagle (475 MW, Alemania). Además, la compañía contará con mayor recurso procedente de las renovables gestionables.
La energética cerró el primer trimestre con una capacidad instalada renovable de 42.300 MW en todo el mundo. Iberdrola genera energía 100% libre de emisiones en el Reino Unido, Brasil, Francia, Italia, Alemania, Polonia, Portugal, Grecia, Rumanía o Bulgaria. La producción libre de emisiones alcanzó en este primer trimestre el 92% del total en España.
Del total de las inversiones, el 35% tuvo por destino los Estados Unidos, un 20% al Reino Unido, otro 20% España, el 15% a Latinoamérica y el 10% restante a Europa Continental y Australia.
El negocio de producción y clientes se ve favorecido en España «por la mayor producción renovable, que conlleva menores aprovisionamientos, pese a los menores precios y los efectos de la gestión extraordinaria de los contratos de gas en el primer trimestre de 2023».
UN VALOR CONFIABLE
La cifra de negocios del grupo en el periodo de enero a marzo alcanzó los 12.678,5 millones de euros, lo que representa una caída del 18% frente al primer trimestre de 2023. No obstante, el flujo de caja operativo (FFO) reportado por la compañía creció un 5%, hasta los 3.145 millones de euros, y un 14% si se excluye el impacto del déficit de tarifa de Reino Unido registrado en el primer trimestre de 2023.
En sus conclusiones finales, Renta 4 explica que la «buena evolución operativa de Iberdrola redundará en «un mejor comportamiento de la cotización», por lo que la financiera concede al valor de la eléctrica la calificación de ‘sobreponderar’ y un precio objetivo de 13,60 euros, frente a los 11,50-12 en que se mueve actualmente en los parqués.
La recomendación de Renta 4 converge con la del 51,6% de los nalistas de Bloomberg, que aconsejan comprar; mientras que un 45,2% llama a mantener la cartera y tan solo un 3,2% apuesta por vender.
MÁS DIVIDENDOS
Por otra parte, Iberdrola distribuirá entre sus accionistas un mínimo de 0,348 euros por acción en concepto de dividendo complementario con cargo a los resultados de 2023, de acuerdo con los términos de la nueva edición del sistema Iberdrola Retribución Flexible, según informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Este importe se suma a los 0,202 euros brutos por acción ya abonados el pasado mes de enero como dividendo a cuenta, lo que hará que la retribución total al accionista con cargo a 2023 se sitúe en los 0,55 euros brutos por acción, un 10,8% más que en el año anterior.
Los inversores de la energética recibirán además 0,005 euros por acción de dividendo de involucración si el quórum de constitución de la junta general de accionistas, que se celebrará el próximo 17 de mayo en Bilbao, alcanza el 70%.