Digi es la mejor operadora en lo que a relación calidad-precio se refiere, según el informe hecho público por JP Morgan en el que analiza a Telefónica y al resto del sector teleco en España. Los analistas destacan la audacia de su política de precios y su expansión en red propia de fibra, y le auguran un buen futuro siempre que la venta de la misma a Onivia sirva para paliar su deuda. Además, en la encuesta realizada a 1.000 consumidores españoles, los analistas han podido constatar que Digi es percibida como la mejor operadora y la más barata, seguida de Lowi, mientras las tres grandes (Telefónica, Masorange y Vodafone) se ven como peores en la relación calidad/precio.
Si obviar que J.P. Morgan hace y busca hacer negocios con empresas cubiertas en sus informes de investigación, y aunque el estudio hecho público el pasado lunes se refería a Telefónica, sus analistas han escudriñado cada aspecto del sector de las telecomunicaciones español, y ha otorgado a Digi un buen número de folios tratando de explicar el éxito de la operadora del grupo rumano en nuestro país.
Tras analizar las tarifas de las principales operadoras como datos que puedan determinar su mayor o menor éxito comercial, el banco se para a realizar «una mirada más cercana a las tarifas de Digi», y establece una conclusión clara; «que Digi ofrece los planes más atractivos tanto en las tarifas de niveles básicos como en los packs de gama alta«.
Digi es percibida como la mejor operadora y la más barata, seguida de Lowi, mientras las tres grandes (Telefónica, Masorange y Vodafone) se ven como peores en la relación calidad/precio.
Destacan que su cobertura consta ya de aproximadamente 8,5 millones de hogares con fibra tirada por la propia operadora, y con los 20,5 millones de casas de la red de fibra de Movistar, y que ese potencial lo explota de maravilla al ofrecer un precio más bajo cuando tiene su propia red de fibra, y un precio más alto donde se vende al por mayor. Con su propia red, la rumana pone precios unos 10 euros mensuales menos que en zonas donde depende de la red de Telefónica y señala como excepcional que, incluso, ofrece una opción de 10Gbps que todavía cuesta 5€ menos que un plan de 1Gbps en la red de Telefónica.
En cuanto al significado de estos datos en materia de ganancias o pérdidas, JP Morgan interpreta que durante los últimos años Digi ha conseguido representar de manera consistente más o menos el 50% de las altas en líneas móviles del mercado y entre el 80 y el 100% de las nuevas altas netas de banda ancha, lo cual «respalda los resultados de nuestra comparación de precios, y muestra que sus tarifas tienen precios muy agresivos».
DIGI, PROVOCADOR DEL ENTORNO COMPETITIVO
El informe de JP Morgan abunda en categorizar al sector de las telecos españolas como una industria que se encuentra en medio de un «cambio transformacional» y que configura un «entorno competitivo cambiante» constante, y en él le da un papel protagonista a la operadora rumana Digi.
Entre lo ocurridos en los últimos meses en el sector en España, también consideran claves eventos pasados, presentes y futuros en los que Digi interviene, como el ocurrido el pasado 20 de febrero, cuando se aprobó la fusión de Orange y MásMóvil, incluidos los remedies otorgados a Digi o la anunciada venta de la red de fibra con 4,5 millones de acceso FTTH a la operadora neutra Onivia por 750 millones de euros, que se conoció el pasado día 5 de abril.
También advierte de lo que ocurrirá dentro de más de dos años, en septiembre de 2026, cuando finalice el contrato mayorista de Digi con Telefónica, momento en el que los que la operadora centroeuropea ha conseguido le permiten plantearse asociarse con Masorange para poder continuar con su extensión de líneas móviles.
Los analistas de la entidad financiera norteamericana hacen un balance de las cifras que se esperan para las que ellos llaman Big4 o «cuatro grandes» en el que incluyen a Digi. Aunque sus volúmenes son más modestos, está ahí porque consideran que puede medirse con las tres operadoras que la superan en cifras. Así, JP Morgan prevé que durante este año 2024 los ingresos de Digi alcanzarán en el mercado español los 815 millones de euros, con una cuota de mercado del 3%, un EDBITDA de 199 millones, un capex de 204 millones de euros, con un 25% de ventas, y no contemple que genere flujo de caja operativos.
Digi tiene actualmente una deuda bruta total (excluidos los arrendamientos operativos) de 1.500 millones de euros. Tiene un ajuste para un efectivo de 0,2 mil millones de euros, la deuda neta de la compañía sin arrendamientos es de 1,3 mil millones de euros o 2,5 veces el EBITDAaL. El saldo de deuda bruta de la empresa comprende 0,85 mil millones de euros en bonos (fijos), 0,45 mil millones de euros en préstamos y acuerdos de crédito (variable) y 200 millones de euros de otra deuda.
JP Morgan prevé que durante este año 2024 los ingresos de Digi alcanzarán en el mercado español los 815 millones de euros, con una cuota de mercado del 3%, un EDBITDA de 199 millones, un capex de 204 millones de euros, con un 25% de ventas, y no contemple que genere flujo de caja operativos
La porción fija de la deuda de Digi se compone de dos bonos: 450 millones de euros con vencimiento en 2025 (tasa del 2,5%) y 400M€ con vencimiento en 2028 (tipo 3,25%). La mayoría de la parte variable tiene un tipo de interés variable de Euribor + 2,225%, un 55% con vencimiento en los próximos dos años 2024-25, un 15% en 2026-27 y el 30% restante en 2028 o más adelante. Digi ha indicado que no espera que su apalancamiento de 2,5x cambie significativamente en el próximos trimestres.
Por todo esto, S&P ha rebajado el pasado mes de marzo la perspectiva de Digi de estable a negativa por sus problemas de liquidez, y esta perspectiva negativa refleja que podría rebajar la calificación de Digi en los próximos seis meses si la empresa no toma las medidas adecuadas para refinanciar sus próximos vencimientos de deuda y mejorar su posición de liquidez.
Según JP Morgan, gracias a la venta de fibra por 750 millones de euros recientemente anunciada, aunque no se ha concretado cuándo se recibirían esos ingresos, Digi podrá utilizarlos para reinvertir en España, pero en el banco esperan «que con ellos refinancien con prudencia de antemano. En teoría, Digi podría financiar primero el vencimiento de la deuda de 2024 (114 millones de euros) y su caja negativa, (121 millones de euros) a través del efectivo en el balance y disponer de su préstamo existente y facilidades de liquidez».
EL REPASO DE JP MORGAN A DIGI
Tras repasar sus orígenes desde que la fundara Zoltan Teszári en 1992 como negocio de televisión por cable en Rumanía, hasta que poner el foco en la significativa evolución del grupo a lo largo de todos estos años, explican que hoy el 60% de los ingresos del grupo provienen de Rumanía, el 38% de España y el 2% de Italia. En términos de EBITDA, Rumania aporta el 79% y España el 22%, compensado parcialmente por una pequeña contribución negativa de «otros que comprenden Italia, Portugal, Bélgica y otros costes centrales».
Los expertos de JP Morgan destacan la audacia de instalarse en España como OMV en 2008, inicialmente dirigido a la población de rumanos residentes en España, «ofreciendo ofertas económicas
llamadas a redes rumanas» y como lanzó los servicios de banda ancha fija en España primero a través de la red de Telefónica mientras construía su propia red de fibra.
Destacan que lanzó servicios comerciales de telefonía fija y banda ancha fija, mediante el acuerdo mayorista con Telefónica, con servicio de descarga y subida a 30Mbps por 25 euros al mes o servicio simétrico de 50Mbps por 30euros mensuales y, además, a todos los clientes que se dieron de alta en un servicio convergente móvil más fibra les ofreció el doble de datos móviles existentes, con 3GB/6GB/20GB ilimitados y paquetes de llamadas que aumentan a 6 GB/12 GB/40 GB por 6/9/12 € respectivamente.
destacan la audacia de instalarse en España como OMV en 2008, inicialmente dirigido a la población de rumanos residentes en España, «ofreciendo ofertas económicas
llamadas a redes rumanas» y como lanzó los servicios de banda ancha fija en España primero a través de la red de Telefónica mientras construía su propia red de fibra
Sin duda una «atractiva estrategia de precios y tarifas sencillas, con las que Digi rápidamente se convirtió en una escala desafiante en los mercados móviles y de banda ancha, y cada año supera al último en términos de adiciones netas (a excepción de 2020)», por lo que desde JP Morgan concluyen que «este fuerte impulso operativo se tradujo en un crecimiento saludable de los ingresos».
Así, desde el banco americano destacan las posibilidades que le dan el posible lanzamiento de red de fibra con otros socios, la construcción de red móvil propia gracias a los remedies de la fusión Orange-Masmovil, y el aire económico para construir esa red móvil que le supone la reciente venta de una parte de su red FTTH a Onivia por por 750 millones de euros. Pero también nombran el posible lanzamiento del servicio de TV, según anunció en la conferencia telefónica de DigiQ423 y otras «ambiciones» de la compañía rumana.
Se refieren al despliegue de la red a nivel nacional en Portugal, con servicios tanto móviles como fijos, durante el segundo semestre de este año, también jugando con la alta calidad y los precios más competitivos, donde espera ser rentable ya en 2 o 3 años después de su lanzamiento.
También quiere desplegar res en Bélgica, donde en cuanto a la red fija, se encuentra en las etapas iniciales de construcción de su propia red de fibra, que ha iniciado en Bruselas. En el lado móvil, tiene un acuerdo de roaming nacional con Proximus por al menos 5 años, con la capacidad de comprar unos 400 sitios móviles de Proximus en los próximos 4 años. También espera arrancar comercialmente allí en el segundo semestre de este año, e incluir tarifas convergentes que incluyan la televisión belga.
Igualmente, la compañía está buscando opciones para acelerar el crecimiento en Italia, planea construir redes fijas para tener un portfolio completo de servicios, lo que ya empezó a hacer el año pasado en la primera ciudad, Torino.