Esta primavera, el clima caprichoso se roba el protagonismo. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) predijo un vaivén meteorológico, y no se equivocó. El sol cede su lugar a nubes grises en un abrir y cerrar de ojos, mientras las lluvias imprevistas desafían las previsiones. El termómetro oscila como un péndulo, confundiendo a quienes intentan vestirse acorde al clima. Los días soleados invitan a la esperanza primaveral, pero las sorpresas climáticas nos mantienen en vilo. Y es que pasamos del calor al frío. Desde la Agencia, ahora nos avisan que se viene un desplome de las temperaturas importante para estos días.