Si de enfermedades se trata, el miedo a sufrir un infarto es una sensación que compartimos todos como sociedad. Sea porque algún familiar tuyo lo ha sufrido o porque sabes que el dolor es agudo y que tiene riesgo de muerte, hacemos todo lo posible para evitar las comidas que pueden provocar que nuestro corazón falle.
Por eso, la Universidad de Harvard reveló los resultados asombrosos de un estudio que buscaba alimentos que prevengan la posibilidad de un infarto. La conclusión fue una fruta conocida y popular en todos lados y que de seguro conoces: la manzana.
¿Una manzana puede salvarme de un infarto?
La fruta es reconocida como uno de los alimentos más saludables y nutritivos para el cuerpo humano. Según la Universidad de Harvard, una en especial, la manzana, ayuda a combatir enfermedades cardíacas. El estudio, llevado a cabo por expertos de esta institución, reveló que las manzanas son excelentes para mejorar la salud debido a su alto contenido de nutrientes, proteínas, fibra, carbohidratos y vitamina C.
Las manzanas son una opción versátil que se puede disfrutar en cualquier época del año y que ofrece notables efectos antioxidantes y antiinflamatorios. Estos beneficios ayudan a prevenir el estreñimiento, reducir los niveles de colesterol «malo», factor principal por el que puedes sufrir un infarto, y disminuir el riesgo de enfermedades crónicas. Gracias a su contenido de fibra y agua, y su baja densidad calórica, las manzanas son ideales para incluir en una dieta saludable diseñada para la pérdida de peso. Esto se debe a que promueven la sensación de saciedad y te ayudan a controlar el apetito.
Enfermedades que tendrás cubiertas si ingieres esta fruta
Incorporar esta fruta a tu dieta diaria junto con una alimentación equilibrada y otros hábitos saludables, como realizar actividad física, es fundamental para proteger el cuerpo contra diversas patologías. La manzana te ayudará a cuidarte de todas estas condiciones:
- Enfermedades cardíacas: los fitoquímicos y la fibra pectina presentes en la cáscara de la manzana protegen el corazón de un posible infarto y a los vasos sanguíneos de los radicales libres, además de reducir el colesterol.
- Diabetes tipo 2: los antioxidantes que se encuentran en las manzanas cuidan tu páncreas, lo que reduce el riesgo de desarrollar esta enfermedad, según destacan los especialistas de Harvard.
- Cáncer: los fitoquímicos y la fibra de las manzanas tienen propiedades antioxidantes que protegen el ADN del daño celular que puede conducir al desarrollo de tumores. Esto reduce las posibilidades de padecer cáncer en áreas como pulmones, colon y tracto digestivo.