Uno de los grandes problemas de todos los adultos es no alcanzar el descanso necesario para rendir bien durante el día. Muchas veces, el estrés acumulado en la vida diurna se hace carne a la noche, justo antes de irnos a dormir, y no hay forma de frenar la cabeza.
Existen un montón de consejos para que entrar al mundo de los sueños sea una transición amable y rápida: gotas para dormir, medicamentos, dejar el móvil 1 hora antes, comer liviano. Pero lo cierto es que ninguna de ellas se asegura funcionar. En este artículo te contaré una técnica infalible que hará que duermas como un angelito, y dile chau al insomnio.
El truco eficaz para un descanso ininterrumpido
Según expertos de Harvard, no es necesario dormir 8 horas cada noche. Un estudio realizado por un equipo de la Universidad Monash de Australia, la Universidad de Manchester en el Reino Unido y el Hospital Brigham and Women’s de Boston, demostró que lo más importante para el descanso óptimo es la regularidad del sueño: la técnica 5-4-3-2-1 puede ayudarte a combatir el insomnio.
Manuel de Entrambasaguas, integrante del grupo de trabajo de Insomnio de la Sociedad Española de Sueño, aseguró que es más importante mantener una consistencia en los horarios de sueño, con una pequeña variabilidad, que dormir ocho horas. Este hábito puede ayudar a «reducir el riesgo de muerte prematura por cualquier causa entre un 20 y un 40%», como lo demostraron en su investigación al analizar los registros de sueño de más de medio millón de personas de entre 40 y 69 años en el Reino Unido.
La técnica 5-4-3-2-1 que está a punto de cambiarte la forma de dormir
Este hábito de la cultura mindfulness, propone este que reflexiones en estas cosas para alcanzar un descanso óptimo:
- Cinco cosas que ves
- Cuatro cosas que oyes
- Tres cosas que sientes con el cuerpo
- Dos cosas que hueles
- Una cosa que saboreas
Esta técnica puede parecer simple, pero es sorprendentemente efectiva para inducir la relajación y mejorar de forma sustancial la calidad del descanso. Sin embargo, la experta Jade Wu señala dos errores comunes que sus pacientes suelen cometer al intentar este ejercicio por primera vez. Uno de los errores consiste en realizar cada punto demasiado rápido, sin detenerse en los detalles; mientras que el otro es juzgar o analizar las experiencias durante el ejercicio, como por ejemplo, si hueles un olor que no te gusta. Ve despacio y piensa a consciencia en estos 5 puntos y de seguro lograrás alcanzar un descanso perfecto.