Ayer en MasterChef 12, los participantes se enfrentaron a un reto muy dulce y especial: la elaboración de pastelería conventual y monástica. María, Samya, Maicol, José, Ramón, Pilar y David compitieron en una serie de pruebas graduales para salvarse. En la primera etapa, dos concursantes fueron liberados; luego, en la siguiente, otros dos se salvaron, dejando a los restantes para un enfrentamiento final que decidiría su permanencia en el concurso.
La primera prueba consistió en preparar yemas de Santa Teresa. Aunque todos batieron con esfuerzo, no todos lograron cocinarlas a la perfección. María destacó con unas yemas casi perfectas, asegurándose la primera salvación. José fue el segundo mejor gracias a sus dulces, aunque tenían un ligero exceso de limón como único defecto.
5NOVEDAD EN MASTERCHEF: EL DELANTAL DORADO
La última temporada de MasterChef ha incorporado una emocionante novedad que ha captado la atención de los espectadores: el delantal dorado. Este nuevo elemento ha añadido un extra de emoción al programa con el objetivo de mantener a la audiencia expectante cada semana. La introducción de un concursante de última hora y el anuncio de nuevos desafíos culinarios cada vez más complicados han sido parte de la estrategia para mantener el interés y la emoción en cada episodio.
En la entrega anterior de MasterChef, hubo un cambio importante en la dinámica del programa. Los jueces, Samantha, Jordi y Pepe, le dieron a la concursante Samya un delantal dorado. Este delantal le brinda una segunda oportunidad única en el programa, permitiéndole regresar la semana siguiente incluso si ha sido eliminada. Es un beneficio que puede cambiar por completo el destino de un participante, dándole una valiosa oportunidad de redención y de seguir avanzando en el concurso. La introducción del delantal dorado ha añadido un nuevo elemento de emoción y expectativa a MasterChef, ya que los espectadores están ansiosos por ver cómo los concursantes aprovechan esta oportunidad y cómo afecta al desarrollo del programa.