Hablar con alguien que tiene mal aliento es una experiencia desagradable y perturbadora. Cada exhalación está cargada de un olor penetrante y desagradable que puede ser difícil de ignorar. La conversación se ve ensombrecida por el constante recordatorio del problema, lo que dificulta la concentración en el diálogo. La incomodidad aumenta con cada palabra pronunciada, y se buscan formas de evitar el aliento nauseabundo que emana de la persona. A menudo, uno se siente atrapado en una situación incómoda, tratando de mantener la compostura mientras lucha por soportar el olor desagradable que emana de su interlocutor. Pero, ¿por qué tenemos mal aliento por las mañanas? Así puedes evitarlo.
9Y también es importante masticas bien

Masticar adecuadamente los alimentos es fundamental para prevenir el mal aliento. Al masticar de manera completa y lenta, se estimula la producción de saliva, la cual ayuda a limpiar la boca y a neutralizar los ácidos que causan el mal olor. Además, masticar bien favorece la digestión adecuada y reduce la acumulación de residuos de comida en los dientes y encías. Por lo tanto, adoptar hábitos de masticación cuidadosos contribuye significativamente a mantener una boca fresca y saludable.