Para ciertas personas, realizar el ritual de poner una cápsula en la cafetera cada mañana se ha convertido en una especie de religión. Desde su llegada a nuestro país en el año 2000, las cafeteras monodosis se han integrado discretamente en nuestra rutina diaria, tanto que en 2017 el Instituto Nacional de Estadística (INE) las consideró uno de los productos más consumidos al calcular la cesta de la compra. Sin embargo, muchos de estos consumidores no saben que algunas de estas cápsulas pueden contener azúcar, una cantidad de cafeína imprecisa y presentar riesgos para el medio ambiente.
4PUEDEN CONTENER MÁS CAFEÍNA DE LO QUE PENSAMOS
Por otra parte, un estudio revela que la cantidad de cafeína en muestras de cápsulas de Nespresso difiere significativamente de las cantidades indicadas por la compañía. Además, se observó que el contenido de cafeína aumentaba con el tamaño del servicio del café (S, M o L). Esto significa que no es fiable predecir la cantidad de cafeína basándose únicamente en el grado de intensidad que Nespresso indica.
Estas conclusiones podrían aplicarse a la mayoría de los productos comerciales de café soluble y suplementos nutricionales que contienen cafeína. Es importante que los consumidores sean conscientes de esta variabilidad y estén atentos al contenido real de cafeína en los productos que consumen.