El cansancio crónico suele estar vinculado a la mala calidad del sueño, afectando la función cognitiva, el estado de ánimo y la salud en general. Factores como el insomnio, apnea del sueño, o simplemente patrones irregulares de descanso pueden provocar este problema. El sueño de mala calidad impide que el cuerpo y la mente se reparen y se regeneren adecuadamente durante la noche, lo que resulta en fatiga persistente durante el día. Es fundamental establecer hábitos de sueño saludables y buscar soluciones para abordar los trastornos del sueño, ya que afectan significativamente la calidad de vida. Por eso, si haces todo lo que te contamos en este artículo, dormirás más y mejor y no estarás cansado.
3Haz estiramientos antes de ir a la cama y también dormirás mejor
Realizar estiramientos antes de acostarse puede mejorar la calidad del sueño. Los estiramientos ayudan a relajar los músculos y liberar la tensión acumulada durante el día, lo que facilita la conciliación del sueño. Además, esta práctica puede mejorar la circulación sanguínea y promover la liberación de endorfinas, lo que contribuye a reducir el estrés y mejorar el bienestar general. Integrar estiramientos suaves en la rutina nocturna puede ser una manera efectiva de preparar el cuerpo y la mente para un descanso reparador.