Se acerca la primavera y con ella el florecimiento de los almendros, que desde mediados de febrero anuncian el final del invierno con un espectáculo natural que deleita la vista, eleva el espíritu y perfuma el aire con su delicada fragancia.
Muchas personas aprovechan esta época del año para visitar lugares donde los almendros en flor son abundantes, ya sea dando paseos por senderos naturales o realizando escapadas a zonas rurales. Además de disfrutar de la belleza de los almendros, también se pueden realizar otras actividades al aire libre, como senderismo, picnic o simplemente relajarse y disfrutar del entorno.
10LA QUINTA DE LOS MOLINOS, EN MADRID
La Quinta de los Molinos, ubicada al final de la extensa calle Alcalá, cerca de la Feria de Madrid, es un remanso de paz con un fuerte carácter mediterráneo. Este antiguo terreno de recreo de 25 hectáreas, que en su origen tenía zonas de explotación agrícola, ofrece un escenario encantador donde se puede pasear entre miles de almendros en flor, junto con otras especies como olivos, pinos y eucaliptos. También cuenta con un pequeño estanque, un palacete y dos molinos que le dan nombre.
La Quinta de los Molinos es uno de los mejores lugares en Madrid para dar la bienvenida a la primavera. Abre todos los días de 6:30 a 22:00 horas y es fácilmente accesible en metro, con la estación de Suances cercana. La floración de los almendros suele ocurrir a finales de febrero o principios de marzo, pero es importante estar atento, ya que este espectáculo natural dura solo unas tres semanas. Es un destino imprescindible para aquellos que buscan disfrutar de la belleza de la naturaleza en pleno corazón de la ciudad.