Ya no hay vuelta atrás y el mundo se va a llenar de robots con forma humana. El mercado mundial de robots humanoides va a ser superior a lo esperado por los analistas de todo el mundo y llegará a generar 38.000 millones de dólares (35.143 millones de euros) para el año 2035, dentro de poco más de 10 años, tal y como han pronosticado los analistas de Goldman Sachs.
Llevamos viendo robots humanoides desde hace unos años, y lejos de seguir viéndoles como una distopia cinematográfica, cada vez es más evidente que van a convertirse en un lucrativo negocio. Sin ir más lejos, al amparo del éxito de la Inteligencia Artificial (IA) generativa, en la última edición del Mobile World Congress, charlar o incluso bailar con Ameca, el robot expuesto por la operadora Etisalat, de Emiratos Árabes. El ingenioso humanoide puede mantener conversaciones con personas gracias a la inteligencia artificial GPT-4, el modelo de pago y última actualización que utiliza ChatGPT.
Y es que ya no es el cine el que nos convence de todo lo útiles que pueden ser estas máquinas. Las compañías tecnológicas que las están desarrollando ya nos ofrecen cantos de sirena que nos hablan de robots que nos van a ayudar en todo, «desde doblar la ropa hasta manipular residuos peligrosos» y cuyos diseños y habilidades han mejorado a medida que la IA se ha desarrollado y el dinero ha llegado a raudales a ese sector.
La jefa de investigación de China en la prestigiosa consultora Goldman Sachs Research, Jacqueline Du, dice en su informe que el negocio alcanzará esos 38.000 millones de dólares en el año 35, y que será más de seis veces más que una proyección anterior, que se quedaba muy atrás con un negocio de solo 6.000 millones de dólares. Du ha cuantificado como la proyección de ventas de robots se ha cuatriplicado hasta los 1,4 millones de unidades en esa próxima década, lo que suponen «un camino mucho más rápido hacia la rentabilidad, con una reducción del 40% del costo de los materiales» que se necesitan para crear estas máquinas.
El informe es sincero sobre cuál ha sido el detonante que ha disparado estas previsiones. «El progreso de la IA fue lo que más nos sorprendió», y se refiere el informe con ello a los modelos grandes de lenguaje (LLM), que han servido par avanzar en los proyectos robóticos, sobre todo con los avances significativos en la IA de extremo a extremo, con la que estos robots se pueden entrenar a sí mismos sin que haya una legión de ingenieros que deban codificar a mano todo su conocimiento.
Lo innecesario en este entrenamiento de la intervención humana ha acelerado el desarrollo de las aparatos humanoides, que cada vez son capaces de hacer más tareas y de adaptarse a nuevas situaciones como mayor rapidez, como poder hacer sus labores fuera de las fábricas, por ejemplo.
ROBOTS DE FABRICACIÓN MÁS BARATA
La comercialización más rápida se va a producir en parte porque los componentes de los robots se han abaratado y podían abaratarse más. Ya en este año 2024, el informe ha podido constatar que el coste de la fabricación de los robots con forma humana ha descendido, «desde un rango que oscilaba entre los 50.000 dólares para modelos de gama baja y los 250.000 dólares para versiones de última generación, por unidad el año pasado, a un rango de entre 30.000 dólares y 150.000 en la actualidad», es decir, una bajada de un 40% mientras que los analistas no esperaban un abaratamiento superior al 15 o el 20%.
La «culpa» la tienen los componentes que son más asequibles y existen muchas más opciones en la cadena de suministro tanto en lo que se refiere a los diseños como a las técnicas de fabricación, que han mejorado y mucho. Y los analistas esperan que mejoren todavía más. Estas mejoras puede acelerar los tiempos de las aplicaciones en las fábricas en solo un año, y en dos o cuatro años para las aplicaciones de consumo que pueden adjudicarse a estos robots.
El estudio estima en 250.000 la cifra de humanoides que se venderán es 2030, y también advierte que la mayoría tendrán un destino industrial, aunque las ventas de robots de consumo superarán el millón de unidades en una década
El estudio estima en 250.000 la cifra de humanoides que se venderán es 2030, y también advierte que la mayoría tendrán un destino industrial y los robots de consumo superarán el millón de unidades anuales en poco más de una década. El aumento del interés y la inversión es otra pista que apunta al auge de estos humanoides de metal.
El gobierno chino inició un fondo de robots para apoyar la investigación y el desarrollo, y los fabricantes de componentes que cotizan en bolsa están contratando personal y dedicando capital y recursos humanos a áreas relacionadas», dice la analista responsable del informe, y también apunta indicios de que la mayor parte del hardware para robots humanoides ya está disponible, o al menos cerca de su madurez.
En cuanto a los países que dominarán este negocio, aunque son las empresas occidentales las que tiene mayor dominio del los modelos de software de IA más sofisticados, ven claro que la fabricación masiva de componentes se va a producir en Asia, porque cuentan ya con la cadena de suministro y los menores costes de fabricación; lo que viene siendo habitual en cualquier tipo de dispositivo electrónico o tecnológico de consumo.
ROBOTS MINEROS, RESCATADORES Y QUÍMICOS
Entre los problemas y contratiempos que puede encontrar este mercado de máquinas con apariencia humana señalan los componentes que precisas de máquinas rectificadoras de alto nivel, (que son escasas), el coste de componente concretos que aún es muy alto, y los tiempo de fabricación, que todavía son enormes.
También el desarrollo de la IA y el software para inculcar a las máquinas habilidades de manipulación, como agarrar objetos, o de interacción, como recibir órdenes de voz de personas). Según Goldman Sachs cree que estas barreras se van a superar enseguida, y pronostica que la demanda de estos dispositivos va a ser muy alta, sobre todo en los entornos industriales y de fabricación como el ensamblaje de de vehículos eléctricos y la clasificación de componentes, porque son más flexibles y capaces de adaptarse a terrenos complicados.
les ven ideales para trabajos de minería, rescate en desastres, mantenimiento de reactores nucleares y fabricación de productos químicos, y proporcionar mano de obra en sectores que no tienen suficientes trabajadores
También son atractivos en tareas «peligrosas, sucias y aburridas» y les ven ideales para trabajos de minería, rescate en desastres, mantenimiento de reactores nucleares y fabricación de productos químicos, y proporcionar mano de obra en sectores que no tienen suficientes trabajadores. Los clientes pueden estar dispuestos a pagar un precio más alto por robots que puedan realizar trabajos peligrosos que la gente es reacia a realizar», afirman en el estudio.
Y es que alrededor del 70% de la fabricación en China ya se realiza mediante maquinaria y automatización, mientras que sólo el 20% se realiza mediante mano de obra y el 10% mediante la gestión. El ofrece una estimación de una tasa de sustitución de mano de obra del 5 al 15% para la fabricación de automóviles, así como para trabajos peligrosos como el rescate en desastres y el trabajo en reactores nucleares, la demanda de robots humanoides puede alcanzar potencialmente entre 1,1 y 3,5 millones de unidades en todo el mundo.
Según concluye el informe, los robots humanoides se conviertan en el próximo dispositivo «imprescindible», no muy diferente a los teléfonos inteligentes o los vehículos eléctricos, porque además de las tareas descritas, servirían, por ejemplo, para el cuidado de ancianos.