Amper registró un beneficio neto consolidado de 2,1 millones de euros en 2023, lo que supone que la compañía sale de los ‘números rojos’ del año anterior, cuando perdió 4,5 millones de euros, según las cuentas remitidas por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) este jueves.
En ese sentido, cabe destacar que las pérdidas de 4,5 millones de 2022 son una reexpresión de las cifras presentadas entonces, dado que en ese momento Amper publicó en sus cuentas enviadas a la CNMV un beneficio neto consolidado de 1,3 millones de euros.
«Este 2023 ha sido un ejercicio de máxima exigencia, en el que hemos avanzado no solo en el posicionamiento y cartera de contratos en nuestras dos unidades estratégicas de negocio, sino que, además, hemos abordado la transformación interna y mejora de la eficiencia del grupo, la reducción del endeudamiento financiero y la mejora de nuestro flujo de caja operativo», ha valorado el consejero delegado de Amper, Enrique López.
La facturación de Amper en 2023 se situó en 369,4 millones de euros, un 14,25% más que los 323,3 millones de euros del ejercicio anterior. Esta última cifra también ha sido revisada, dado que en la presentación de los resultados de 2022 los ingresos fueron de 337,46 millones de euros.
Asimismo, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) de Amper en 2023 fue de 25,4 millones de euros, lo que supone un 126,8% más que los 11,2 millones de euros del año previo. Al igual que las otras dos magnitudes, el Ebitda también ha sido revisado dado que el presentado en las cuentas de 2022 era inicialmente de 18,58 millones de euros.
En este contexto, el margen Ebitda de Amper en 2023 fue del 6,9%, lo que representa un incrementeo de 3,4 puntos porcentuales frente al del 3,5% de 2022 (con las cifras presentadas inicialmente en 2022 ese margen era del 5,51%).
Amper ha destacado que el incremento de las ventas y del margen Ebitda se debe a la nueva estrategia comercial y al modelo de negocio enfocado a proyectos y servicios de «mayor valor añadido y margen», además de las mejoras operativas centradas en la «eficiencia y en la reducción de costes».
«El reforzamiento de la estructura de capital con la ampliación de capital con derechos de 31 millones de euros realizada (…) junto con el retorno a los flujos de tesorería de explotación positivos por 4,8 millones de euros, ha permitido una significativa reducción de los ratios de endeudamiento financiero neto sobre Ebitda, pasando a un ratio de 2,8 veces excluyendo la financiación alternativa, criterio histórico que ha usado la compañía, y de 4,2x incluyendo dicha financiación», ha añadido la empresa.