Dada la situación económica actual, con un aumento constante de los precios debido a la inflación y al alza en los costos de la energía y los combustibles, es común recurrir a las tarjetas de crédito para hacer frente a imprevistos. Es crucial elegir sabiamente qué tarjetas utilizar y cómo administrarlas para evitar problemas futuros.
Una tarjeta de crédito es un medio de pago que permite a los usuarios realizar compras o retiros de efectivo hasta cierto límite de crédito establecido por la entidad emisora. Los usuarios pueden utilizar el crédito concedido para realizar compras y luego pagar el saldo total o parcial en el futuro, con intereses si es necesario. Dentro de estos sistemas de crédito se encuentran las tarjetas revolving, que son más comunes de lo que se piensa. Entender cómo operan es crucial para evitar que se conviertan en un problema.
9SENTENCIA DEL TRIBUNAL SUPREMO
La Sentencia del Tribunal Supremo establece que para determinar si los intereses pactados en contratos de tarjetas revolving son usurarios, se debe comparar el interés pactado con el interés medio de mercado publicado por el Banco de España. Este interés medio se conoce como TEDR (Tipo Efectivo de Definición Restringida) y equivale al TAE (Tasa Anual Equivalente) sin incluir comisiones.
Según la sentencia, un interés se considera «notablemente superior» si la diferencia entre el interés pactado y el interés medio de mercado supera los 6 puntos porcentuales. Por lo tanto, si el interés pactado en una tarjeta revolving es notablemente superior al interés medio de mercado según este criterio, podría considerarse usurario y, por lo tanto, nulo. Esta determinación proporciona una guía clara para evaluar la usura en los contratos de tarjetas revolving y proteger los derechos de los consumidores frente a prácticas financieras abusivas.