El ajo, un bulbo aromático perteneciente a la familia de las liliáceas, es un ingrediente esencial en la dieta mediterránea debido a sus propiedades culinarias y medicinales. Su presencia en platos tradicionales como el alioli, la salsa marinara y el gazpacho lo convierte en un elemento distintivo de esta dieta. Además de su delicioso sabor, el ajo es conocido por sus beneficios para la salud, como fortalecer el sistema inmunológico, reducir la presión arterial y combatir los radicales libres gracias a sus compuestos antioxidantes. Su versatilidad y valor nutricional lo convierten en un pilar de la alimentación mediterránea. Ya sabías los múltiples beneficios que tiene en el ser humano, ahora descubre lo que le hace a las plantas: te lo contamos a continuación.
9Ahora, aplícalo de esta manera
Para aplicar el ajo a tus plantas, primero pela minuciosamente los 3 o 4 dientes, asegurándote de quitar toda la piel. Luego, coloca los ajos pelados en el vaso de la licuadora y añade medio litro de agua. Licúa hasta que los ajos se disuelvan completamente en el agua. Después, vierte el líquido en un spray con atomizador y rocíalo directamente sobre la tierra de tu planta para que se mezcle con sus nutrientes y proporcione sus beneficios.