La proliferación de imágenes hiperrealistas generadas por Inteligencia Artificial plantea el desafío de distinguir entre lo real y lo falso en la era digital. Este fenómeno no solo amenaza la privacidad personal, sino que también podría dar lugar a situaciones donde se utilice la imagen de alguien para crear contenido falsificado, como vídeos o fotografías comprometedoras, con el riesgo de difamación o manipulación de la percepción pública.
Estos días hemos sido testigos de la polémica por la difusión viral de imágenes muy explícitas generadas por inteligencia artificial de la famosa artista Taylor Swift. Este incidente vuelve a evidenciar los riesgos asociados con el mal uso de esta nueva tecnología capaz de crear imágenes convincentemente reales y perjudiciales.
10EJERCER EL DERECHO AL OLVIDO
Una recomendación adicional de los expertos es ejercer el «derecho al olvido» o derecho de supresión ante los motores de búsqueda principales, con el objetivo de evitar que el contenido indexado siga apareciendo en los resultados. También se sugiere realizar esta acción en redes sociales para lograr que el contenido desaparezca. Este derecho al olvido puede ser ejercido para cualquier tipo de contenido, incluido el generado con inteligencia artificial, especialmente si se trata de contenido sexual no consensuado.
Para ejercer el derecho al olvido, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) facilita un formulario en su página web que podemos completar con nuestros datos. Después de rellenarlo, debemos buscar el contacto del Delegado de Protección de Datos (DPO) del organismo al que solicitaremos la supresión de nuestros datos. El siguiente paso consiste en enviar este documento, junto con una copia de nuestro DNI para fines de identificación. Este procedimiento permitirá iniciar el proceso de eliminación de información no deseada de la red.