El sector de la energía se encuentra en un histórico momento de transición en el que la industria renovable, a pesar de sus tribulaciones en Bolsa, lleva la voz cantante, lo que se refleja en la evolución de sus necesidades de personal. En este ámbito, ingeniero de desarrollo de negocio, desarrollador de software y técnico de mantenimiento de fotovoltaica se alzan como el ‘triunvirato’ de perfiles más cotizados y mejor retribuidos.
El dato procede de la tercera edición de la Guía Salarial Adecco Energéticas, presentada el martes 24 de enero. El documento expone un completo análisis de las remuneraciones que este pujante sector ofrece en nuestro país en 2014, centrándose en las diez posiciones más demandadas en la actualidad.
LOS TRES ‘REYES MIDAS’ DE LA ENERGÍA
El primer cargo de esta decena es el de ingeniero de desarrollo de negocio, con un sueldo que en regiones como Aragón puede estar en 40.000 euros brutos anuales, pero que en otras autonomías como la Comunidad de Madrid (CAM) puede alcanzar los 65.000 euros. La tendencia salarial de este puesto en 2024 es de subida.
Este perfil es responsable de identificar oportunidades comerciales y de crecimiento. Sus funciones incluyen analizar el mercado, evaluar viabilidad de proyectos, desarrollar estrategias para la expansión y establecer relaciones con clientes y socios potenciales. Trabaja en la búsqueda de nuevas oportunidades de negocio y en la implementación de estrategias para el crecimiento y la sostenibilidad en el ámbito energético.
EL SALARIO DE UN TÉCNICO DE MANTENIMIENTO DE FOTOVOLTAICA OSCILA ENTRE LOS 30.000 EUROS ANUALES DE MURCIA Y LOS 50.000 QUE PERCIBE UN PROFESIONAL DE ESTE TIPO EN EL PAÍS VASCO
En el segundo puesto se encuentra otro perfil de desarrollo, en este caso de software. La banda salarial de este perfil, uno de los más demandados en el sector, se sitúa en un mínimo de 34.000 euros brutos anuales en autonomías como Castilla-La Mancha, y llega a alcanzar los 60.000 euros en regiones como Andalucía o la Comunidad Valenciana en su banda más alta. También es una posición con una perspectiva salarial de crecimiento para este año.
Estos profesionales tecnológicos se encargan de crear aplicaciones, programas o sistemas informáticos específicos para el sector energético. Trabaja en la creación de soluciones tecnológicas innovadoras adaptadas a las necesidades y retos de la industria energética, contribuyendo así a optimizar sus procesos y operaciones.
La medalla de bronce se la llevan los técnicos de mantenimiento de fotovoltaica, con un salario promedio que puede ir desde los 30.000 euros anuales de la Región de Murcia o de la Comunidad Valenciana, hasta los 50.000 euros brutos al año que percibe en su franja más elevada un profesional en el País Vasco. Remuneraciones que están también en alza este año.
Estos especialistas están centrados en el cuidado y la operación de sistemas de energía solar. Sus funciones incluyen realizar inspecciones, mantenimiento preventivo y correctivo en paneles solares y equipos asociados. También se encarga de identificar y solucionar fallas, garantizando el óptimo funcionamiento de los sistemas fotovoltaicos para maximizar la generación de energía.
Los puestos restantes del top ten están ocupados por los perfiles de desarrollador de mantenimiento (32.000-50.000 euros anuales), coordinador de seguridad y salud (35.000-50.000), coordinador de obra (35.000-50.000), jefe de estación de servicio (35.000-50.000), técnico instalador de fuentes renovables (32.000-45.000), comercial de energías renovables (28.000-45.000) e ingeniero junior en energías renovables (24.000-31.000).
TENDENCIAS DE LA ENERGÍA EN 2024
La Guía Adecco identifica las corrientes que se están haciendo notar en el escenario energético durante el año que acabamos de estrenar y que cobrarán aún más fuerza a lo largo del ejercicio.
En primer lugar, destaca el aumento de la inversión en energía renovable, como la solar y la eólica, ha impulsado la demanda de profesionales con experiencia en estas tecnologías y en la gestión de proyectos relacionados con energías limpias. Este fenómeno es análogo al que está viviendo la eficiencia energética, que experimenta una creciente conciencia social sobre su importancia.
Por otro lado, la digitalización de la infraestructura energética, incluida la medición inteligente y la gestión de datos, ha aumentado la demanda de profesionales en tecnología de la información y comunicación (TIC) especializados en el sector energético.
Finalmente, las áreas de la transición energética, la movilidad sostenible y el hidrógeno ‘verde’ también presentarán jugosas oportunidades laborales y de negocio.