En el hogar, uno de los elementos que requiere de una limpieza constante y adecuada es, sin duda alguna, el inodoro. Mantener este espacio higienizado no solo brinda comodidad y bienestar, sino que también es esencial para prevenir la propagación de bacterias y enfermedades.
3¿Cómo se aplica esta mezcla?
El primer paso es esparcir la sal por toda la superficie del inodoro, asegurándote de cubrir bien cada rincón. La sal actuará como agente abrasivo, eliminando cualquier mancha o residuo que pueda haber adherido. Además, sus propiedades antibacterianas ayudarán a desinfectar el inodoro de forma natural.
A continuación, mezcla el bicarbonato de sodio con el jugo de limón en un recipiente aparte. Esta combinación generará una reacción efervescente que potenciará aún más las propiedades de la sal, haciendo que la limpieza sea más profunda y efectiva.