A principios de año, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) emitió pronósticos que alertaban sobre la llegada de sucesivas borrascas a España. Estas predicciones se basaban en análisis meteorológicos y modelos climáticos que indicaban condiciones propicias para la formación de sistemas de baja presión y perturbaciones atmosféricas. A lo largo de los primeros meses del año, las predicciones de la AEMET se cumplieron de manera notable, con la llegada consecutiva de varias borrascas que afectaron diferentes regiones de España. Estos eventos meteorológicos llevaron consigo fuertes lluvias, vientos intensos y, en algunos casos, condiciones adversas que requirieron medidas de precaución por parte de la población. Sin embargo, desde la agencia, ahora se muestran preocupados por lo que nos espera en febrero.
1Lo habitual en febrero en España es que haga frío
En febrero, España experimenta típicamente un clima frío y variable. Este mes se caracteriza por temperaturas invernales, con mínimas que suelen descender, especialmente durante la noche. Las regiones del interior y zonas montañosas pueden experimentar condiciones más gélidas, mientras que en las áreas costeras, el frío puede ser moderado. Las precipitaciones son comunes, con lluvias y nieve en áreas elevadas. La influencia de sistemas de alta presión puede generar días soleados, pero las mañanas y noches siguen siendo frescas. Este patrón climático es una constante en febrero, marcando la transición gradual hacia la primavera. Pero tal y como apuntan desde la AEMET, este mes de febrero pinta muy diferente.