La cerveza, una de las bebidas más antiguas y populares en el mundo, ha sido apreciada a lo largo de la historia por diversas culturas. Su elaboración combina agua, malta, lúpulo y levadura, creando una amplia variedad de estilos con distintos sabores y aromas. Desde las cervezas artesanales hasta las industriales, la diversidad de opciones satisface gustos diversos. La cerveza no solo es una bebida social, sino también un elemento cultural presente en festividades y celebraciones alrededor del globo. Su versatilidad en maridajes gastronómicos la convierte en una compañía perfecta para diversos platillos. A continuación, te contamos cuáles son las diferencias entre las que no están filtradas y las que sí.
9La cantidad de calorías es otra de las diferencias
La cantidad de calorías es una distinción nutricional entre la sin filtrar y la filtrada. La presencia de sedimentos y levaduras en la cerveza sin filtrar puede aumentar ligeramente su contenido calórico en comparación con la filtrada, que pasa por un proceso de clarificación. Aquellos que buscan controlar su ingesta calórica pueden considerar esta diferencia al elegir entre ambos estilos de cerveza, ya que puede influir en el equilibrio nutricional de su elección.