‘La Promesa’ cumple su primera semana del año en TVE con una destacable audiencia y un éxito que seguramente se siga repitiendo durante los próximos meses. Y es que sus interesantes tramas y sus historias de amor y desamor han hecho de esta serie una de las más seguidas de los últimos años.
Esta primera semana del año ha sido realmente intensa para los habitantes del palacio. Todo ha estado muy revuelto desde que Jimena perdió la cabeza, hasta el punto en que Catalina ha estado a punto de perder la vida. Además, recientemente hemos sabido que María está secuestrada. Avanzamos lo que va a ocurrir esta tarde en ‘La Promesa’.
1‘La Promesa’: don Pelayo avanza con su negocio de tráfico de armas
Si bien las cosas ya estaban revueltas, hay algo que ha cambiado por completo la vida en La Promesa. Esto ha sido el incendio provocado por Jimena, que perdió la cordura y prendió fuego a su dormitorio con Catalina narcotizada e inmóvil dentro.
Rómulo y Jana consiguieron sacarla de la habitación de milagro; eso sí, con los pulmones muy afectados. A pesar de los intentos de Cruz por atrasar el viaje, finalmente Pelayo y Mauro pudieron acudir a un pueblo lejano para conseguir oxígeno y salvar la vida de la joven. Llegaron justo a tiempo, alegrando a todos menos a Cruz, lo que ha hecho que las alarmas sobre la verdadera cara de su esposa salten para Alonso.
En este viaje vital para Catalina, tuvo lugar un misterioso incidente con el vehículo. Aunque el marqués trató de averiguar el motivo, la marquesa se las ingenió para que no descubriera nada. Por otro lado, Pelayo culpó del mismo a Jerónimo, protagonizando una discusión en la que este último le recordó al conde que sin confianza no podrían seguir adelante con su negocio.
Un negocio de tráfico de armas en el que está involucrado el empresario inglés Mr. Cavendish. El hombre visitó La Promesa con la intención de saber si el palacio es el sitio idóneo para esconder armas, y a pesar de sus dudas, el Conde de Añil le convenció de que así era. Ahora está aprovechando la reforma del dormitorio incendiado para tal fin.
Por su parte, Margarita ha tratado de abrir los ojos a su sobrina sobre la verdadera identidad de don Pelayo, pero la joven sigue completamente enamorada y sueña con irse de viaje con él. El Conde de Añil sigue usando la empresa de mermeladas de Catalina como tapadera. Su última propuesta ha sido la de lanzar una nueva línea de negocio con una salsa de tomate elaborada por Lope, lo que a Jerónimo no le ha hecho demasiada gracia, recordándole a Pelayo que se centre en lo que debe, ya que Mr. Cavendish pronto regresará a La Promesa para recoger armas.
Respecto a Jimena, sus últimas acciones han colmado el vaso. Los marqueses llamaron a sus padres, los Duques de Infantes, para ayudarles a controlar la situación, y ellos han decidido llevársela a casa. Antes de irse, Jimena le pidió a Jana que cuidara de su esposo, sin saber que es la mujer con la que se ve a escondidas.
Más tarde Abel, tras una de sus visitas a Jimena, le aconsejó a Manuel que viera a su esposa, y aunque en un principio se negó, finalmente tuvo que aceptar. Está seguro que las acciones de Abel están enfocadas a alejarlo de Jana. Y no anda desencaminado: el médico ha chantajeado a la doncella: o vuelve con él o descubre ante todos su relación con Manuel.