El ponche de Navidad es una rica bebida muy cremosa que no es demasiado tradicional en España, pero que todos hemos visto en multitud de películas. Suele tomarse en Acción de Gracias, en Navidad o en Año Nuevo en países como Canadá y Estados Unidos. La historia de su origen tiene muchas versiones, pero la más extendida es que el ponche comenzó a prepararse en 1826 cuando un grupo de cadetes de la Costa Oeste de Norteamérica se dispuso a celebrar la Navidad por todo lo alto, para compensar la tristeza de no poder reunirse con sus familias en una fechas tan señaladas.
6UN GOLPE DE CALOR
Después llevamos toda esta mezcla al fuego, en una olla o cacerola, y lo ponemos a fuego lento. Hay que ir removiendo todo el rato y mantener al fuego hasta que comience a espesar. No tiene que llegar a hervir. La temperatura perfecta para conseguir un ponche ideal son 82 grados, así que si contamos con un termómetro de cocina, puede ser de gran ayuda. Una vez que tengamos una crema suave y espesa, apagamos el fuego y dejamos que enríe a temperatura ambiente.