La mayoría de las personas sufrimos una escasez de tiempo durante el día debido al ritmo acelerado de nuestras actividades diarias. Este frenesí nos impide abordar las tareas menos urgentes, que vamos postergando hasta encontrar un breve momento de tranquilidad, generalmente justo antes de ir a dormir. En esos momentos, ya sea en el sofá o en la cama, realizamos compras en tiendas virtuales sin prestar atención a los precios, nuestras necesidades reales o si realmente nos conviene adquirir esos productos. La Sociedad Española de Neurología advierte que esta automatización en nuestras transacciones puede tener repercusiones no solo para nuestro bolsillo.
6NAVEGAR POR INTERNET DURANTE LA NOCHE TAMPOCO ES BUENA IDEA
Por otra parte, hacer compras al atardecer o durante la noche no solo afecta al presupuesto mensual, sino que también impacta en la calidad del sueño y el descanso. En este momento del día, se espera relajación y desconexión, pero navegar por Internet y realizar compras genera un estado de hiperalerta y un aumento en la secreción de dopamina, dificultando conciliar el sueño. Esto puede crear un círculo vicioso, llevando a un sueño más corto y una peor forma física y mental.
La Sociedad Española de Neurología destaca la importancia crucial de un sueño adecuado para un rendimiento óptimo en nuestras actividades diarias. Cuando la cantidad de horas de sueño es inferior a lo recomendado (aproximadamente 7 horas en adultos sanos) o de baja calidad debido a despertares frecuentes o trastornos del sueño, funciones cerebrales esenciales como la atención, la memoria, la regulación emocional y la percepción sensorial se ven afectadas.
