A priori, atendiendo a la fecha en la que sobre el papel, la ministra de Economía, Nadia Calviño, se tiene que incorporar al Banco Europeo de Inversiones (BEI), la de hoy va a ser la última vez que Nadia Calviño se reunirá con la banca, en este caso, con las principales patronales del sector: la AEB, la CECA y la UNACC, así como con la Asociación de Usuarios Financieros (Asufin) y la Plataforma de Mayores. Sobre la mesa, el análisis de diversas cuestiones sobre la mejora de los servicios financieros y el posible incremento del umbral para recibir ayudas de cara al pago de la cuota de las hipotecas. La reunión se celebrará con el tema del impuesto a la banca de nuevos sobrevolando. Al respecto, según fuentes del Ministerio de Hacienda tardará unos meses en que el Gobierno analice el ‘impuestazo’ para ver si se mantiene como está ahora o sufre variaciones, una cuestión en la que no hay unanimidad en el Gobierno, pues Calviño apuesta por su revisión y la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, presiona con declaraciones públicas para que se mantenga. Fuentes del sector financiera esperan que en la que, a priori, será la última cita de Calviño con la banca como titular de Economía. Fuentes del sector esperan un reconocimiento por parte de la todavía ministra a la gestión de las entidades y a la labor que realizan.
DE LA AUTORIDAD AL UMBRAL
La de este lunes puede ser la última vez que Calviño se vea como ministra de Economía con la banca española. Quedan cuestiones importantes por delante, temas como la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, sometida a audiencia pública; el impuesto a la banca, para ver si es temporal o definitivo o si se reformula y el umbral para que el Estado ayude con el pago de las cuotas de hipotecas, algo que la banca considera innecesario por el nivel de morosidad actual. El tema es si estas cuestiones se resolverán antes de que la todavía ministra de Economía asuma la presidencia del BEI.
La banca está a la expectativa de qué es lo que vaya a hacer el Gobierno con el impuesto temporal. Esperan que, como publicó MERCA2, sea verdad que el Ejecutivo va tomarse su tiempo, meses, para ver hacer un análisis del impuesto a la banca y ver si lo reformula, de manera que puede que sea fijo, que se extienda en el tiempo o que desaparezca. El tema es que si el Gobierno echa marcha atrás con las energéticas, va a tener difícil justificar el impuesto solo para un sector, un impuesto que está recurrido. La vicepresidenta primera, ha anunciado que reformulará la tasa “teniendo en cuenta que las circunstancias han cambiado” con respecto al escenario de los tipos de interés y la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz se opone. “Los que más tienen, más tienen que aportar”, ha recordado la líder de Sumar.
La banca está a la expectativa de qué es lo que va a hacer el Gobierno con el impuesto temporal
En cuanto al umbral, estiman que no es necesario aumentarlo. Según publicaron ‘Cinco Días’ y ‘El País’, “Economía quiere ampliar el escudo social aprobado a finales de 2022 para proteger a las familias endeudadas ante la fulgurante subida de tipos de interés”. “El Ejecutivo aprieta a la banca para elevar hasta los 37.800 euros el umbral de renta por debajo del cual los hogares se pueden acoger al Código de Buenas Prácticas, el protocolo que permite flexibilizar los pagos de la hipoteca. Esta iniciativa ya se recogió en el pacto entre PSOE y Sumar. También presiona para volver a quitar el año que viene las comisiones que las entidades cobran por las amortizaciones anticipadas y por el cambio de hipoteca. Esta supresión de las penalizaciones beneficia a todos los clientes con independencia de sus ingresos, es temporal y acaba el 31 de diciembre de este año. Pero la idea es que se prorrogue otro ejercicio”.
Economía quiere ampliar el escudo social aprobado a finales de 2022 para proteger a las familias endeudadas
El otro punto, que pretenden las asociaciones de consumidores, que están más cerca del Gobierno que de las patronales bancarias, que se aclare que esta exención de las penalizaciones no solo sirve para cambiarse a hipotecas a tipo fijo, sino que también se aplica al pasarse a un tipo mixto. Esta es una reclamación de las asociaciones de consumidores, que señalaban que la norma era algo ambigua sobre este punto.
Banca y umbral
La banca considera que no es necesario aumentar el umbral y tira de datos para ello. “La mora de las hipotecas está por debajo del nivel previo al Código de Buenas Prácticas que quiere ampliar Calviño”, apuntan. El último dato disponible corresponde al segundo trimestre y habla de un nivel de dudosos del 2,45%. Además, según el Informe de Estabilidad Financiera publicado en octubre por el Banco de España, las entidades habían recibido 42.000 peticiones para acogerse a estos códigos, de las que solo unas 4.200 habían sido aprobadas. La cuestión quedará pendiente, sobre el papel, para quien reemplace a Calviño.
Está por ver si el Gobierno legislará sin acuerdo de banca. En el sector consideran que la banca está haciendo un buen papel y esperan que el Gobierno se lo reconozca en esta cita.
Estos son temas que pueden estar en la cita, donde, la convocatoria es para hacer balance del funcionamiento del código de buenas prácticas. Según fuentes citadas por ‘El País’, “el acuerdo tiene que cerrarse en los próximos días y las modificaciones se incluirán en un decreto antes del final de año. Esta celeridad se debe a que una parte de las medidas pierde su vigencia en 2024 y a que “la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, solo seguirá unas semanas más en el cargo y quiere dejar zanjado este asunto antes de su marcha al Banco Europeo de Inversiones”.
El acuerdo de hace un año tenía dos vertientes. Por un lado, se reforzó el Código de Buenas Prácticas, en vigor desde 2012 y aplicable a rentas de hasta 25.200 euros anuales. A este se le añadió además una disposición temporal por la que se suprimen durante este año las comisiones por amortizaciones totales o parciales de todos los clientes. Por otro lado, se creó un mecanismo alternativo y transitorio para socorrer a familias endeudadas a tipo variable que posean unos ingresos anuales de hasta 29.400 euros.