La lotería instantánea el ‘Rasca’ de la ONCE ha cumplido nueve años en España. A punto de celebrarse el sorteo de la Lotería de Navidad, nos fijamos en su ‘sustituta’ durante todo el año. Se trata de un juego físico y barato, de fácil acceso a través de los puestos de la ONCE, estancos o gasolineras, pero también es un juego online, a través de la web y la app, que solo en 2022 generó ingresos a la institución por valor de 944 millones de euros. Su accesibilidad proporciona alegrías inmediatas por toda España, pero también genera graves problemas de ludopatía a personas de todas edades, incluidos los menores, a quienes les resulta muy fácil saltarse las regulaciones conseguir jugar por poco dinero.
Era un 15 de abril de 2014 cuando la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) anunció que salía al mercado español el ‘Rasca de la ONCE’, la lotería instantánea que ofrecía por entonces premios de hasta 3.000 euros por el pago de solo 50 céntimos. La organización prometía entonces que el nuevo juego ofrecía un premio por cada 3,5 boletos y dejó claro cuáles eran sus intenciones; el nuevo producto estaba pensado «para todo el mundo, pero además de dirigirnos a nuestros clientes habituales, intentaremos captar un nuevo nicho de clientes que lo constituyen los inmigrantes, los jóvenes y las mujeres«, según explicaba en la presentación el entonces director general de la ONCE, Ángel Sánchez.
EL PREMIO ENCERRADO
Su atractivo era que ofrecía la posibilidad de obtener premio de forma inmediata, de manera que lo que se compra es un premio encerrado, una ilusión oculta, una sorpresa, sin tener que esperar a la celebración de un sorteo», decía el director general de la ONCE hace diez años. La institución hizo valer éxito de la implantación de este tipo de lotería barata e inmediata desde los años 80 en países de Europa como Francia, Reino Unido, Italia, Portugal, Bélgica, Alemania, Austria, Noruega y Suecia.
El lanzamiento de la nueva lotería estuvo apoyado por una campaña de publicidad en televisión, radio, Internet y soportes exteriores, que no ha dejado de reiterarse e intensificarse constantemente. Los premios han sido recurrentes a lo largo y ancho de la geografía nacional durante estos nueve años, como también lo han sido los problemas generados.
LA ONCE OFRECE JUGAR DESDE LOS 25 CÉNTIMOS
El juego es simple y de gran eficacia. Consiste en la adquisición de unos boletos, tanto físicamente en los puestos de la ONCE, que en 2021 superaban los 71.000 en toda España, donde se vende el cupón y otros juegos llamados activos (‘Súper ONCE’, el ‘Eurojackpo’t o el ‘Triplex’). El Rasca también se vende en estancos y gasolineras, o bien online a través de web y una app. El precio del boleto físico oscila entre los 0,50 céntimos de euro hasta los 10 euros, y los boletos con soporte electrónico se pueden adquirir desde los 0,25 céntimos de euro hasta también los 10 euros. En ambas opciones hay precios intermedios desde 1, 1,5, 2, 3 y 5 euros, y en cada precio se pueden obtener boletos con distinto nombre y temática, que se refleja en atractivas y vibrantes infografías.
«para todo el mundo, pero además de dirigirnos a nuestros clientes habituales, intentaremos captar un nuevo nicho de clientes que lo constituyen los inmigrantes, los jóvenes y las mujeres»
Así, según el gusto del jugador, se pueden encontrar con distintas mecánicas y nombres como «Rasca de Verano electrónico 2023», ‘Rasca de Navidad’, ‘Big money slingo’, ‘Gran círculo de colores
electrónico’ o ‘Mega Millonario’, hasta alcanzar las cincuenta posibilidades de juego. Los más nuevos recién aparecidos con motivos de las fiestas navideñas son el'»Fun Fun Fun,’ por 0,50 céntimos, donde se pueden ganar 2.000 euros, o el llamado ‘Regalos de Navidad’, al precio de 3 euros y con el que se puede ganar hasta 125.000 euros de premio. Con el ya nombrado ‘Rasca de Navidad’, que cuesta 10 euros, se puede alcanzar el millón de euros en premios.
El precio del boleto físico oscila entre los 0,50 céntimos de euro hasta los 10 euros, y los boletos con soporte electrónico se pueden adquirir desde los 0,25 céntimos de euro. Según el boleto y su precio, los premios van desde 1 euro, hasta un millón de euros. En la página web de la ONCE informan constantemente de los boletos favoritos para rascar y de las novedades. Por supuesto, también aparece cada uno de los premios que, al menos en la web, se han ganado y la hora en la que se ha registrado el premio. Hay jugadores las 24 horas del día.
LUDOPATÍA BARATA Y ACCESIBLE
El premio es instantáneo, y basta acercarse directamente a los puntos de venta autorizados, a los en los centros ONCE o entidades bancarias autorizadas. Rápido, sin necesidad de realizar una gran inversión, y muy ilusionante, porque un premio pequeño se cobra en seguida y, en cuanto a los grandes, constantemente en los medios de comunicación de toda España salen noticias que corroboran su veracidad y la felicidad que proporcionan a gente de cualquier clase social, aunque en general aparecen los premiados de clases humildes.
Ser barato, accesible, y estar disponible a cualquier hora genera mucha ilusión, pero también muchos problemas de ludopatía entre las clases con una economía media, baja o incluso vulnerable. Y los menores, pese a la prohibición explícita de que no se les puede facilitar el acceso o la compra de juegos de azar, al Rasca terminan jugando.
Los y las profesionales de la psicología coinciden en lo peligroso de este tipo de juegos a la hora de generar dependencia y enfermedad. Las organizaciones que luchan contra la ludopatía y el juego, como han explicado a MERCA2 desde la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR), coinciden en el peligro del ‘Rasca’ de la ONCE, porque sus efectos nocivos afectan a los más vulnerables, «destruye vidas y familias enteras» incluidos los adolescentes.
Aunque en España está expresamente prohibido el juego a los y las menores de edad, existen cientos de trucos (desde falsificar un DNI con Photoshop, pedir a un primo mayor que se lo compre o falsear los datos que rellenar cuando se bajan la app o acceden a la web). En 2021, un 6,4% de los estudiantes de 14 a 18 años reconoció haber jugado dinero tanto online como presencial durante el último año. Los menores juegan según los datos recogidos en 2022 por el informe sobre Trastornos Comportamentales del Ministerio de Sanidad.
sus efectos nocivos afectan a los más vulnerables, «destruye vidas y familias enteras» incluidos los adolescentes
Hay estudios realizados por la Dirección General de Ordenación del Juego, dependiente del hasta este noviembre Ministerio de Consumo, y por otros informes de asociaciones e instituciones como las distintas Oficinas de Defensor del Menor. Las asociaciones indican que sobre los menores, precisamente, no hay datos reales que reflejen a todas las desgarradoras historias humanas de trastornos que llegan hasta sus sedes. Y, por supuesto, se quejan de que la publicidad y alcance de la lotería instantánea, o Rasca, no esté limitado, porque la legislación dejó los productos de la ONCE, al igual que los de Loterias del Estado, al margen de la legislación preventiva contra la ludopatía.
EL COMPROMISO ELECTORAL DE SUMAR
La Ley del juego de 2011 ya limitaba la publicidad del juego físico y el decreto del entonces Ministro de Consumo, Alberto Garzón, de 2021, consiguió poner puertas al campo de la promoción del el juego online. Esto no impide a la ONCE anunciar sus juegos, porque su actividad está considerada un «uso social». Su regulación es constante, como se puede ver en esta publicación del BOE para el tercer trimestre de este año, aunque esta, claramente, no palía los graves problemas que genera entre la población más vulnerable que se engancha y acaba sufriendo los efectos de la ludopatía.
El actual Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, que dirige Pablo Bustinduy, de Sumar, pretende seguir la estela de su antecesor. A las asociaciones de profesionales que luchan contra la ludopatía siempre les ha parecido que la aprobada es una regulación insuficiente, y que la calificación de la que goza la ONCE a la hora de poner en el mercado la lotería instantánea es de extraordinario privilegio, y que se enmascara la enfermedad y la dependencia que genera.
Precisamente, la formación política Sumar incluyó claramente en varios puntos de su programa electoral (en el apartado en el que habla del consumo sostenible y con derechos, en el que habla de la salud mental, en el que nombra la atención a las adicciones y en el que se refiere al Plan Integral de salud mental para jóvenes. La intención es conseguir que «los jóvenes no incurran en prácticas de juego peligrosas y asegurar un mayor control sobre la venta de loterías instantáneas y sobre la verificación de la edad en la venta de productos de lotería», según reza el programa.