El concepto de «suplemento alimenticio» abarca una amplia variedad de productos que engloban vitaminas, minerales, hierbas, productos botánicos, aminoácidos y enzimas, entre otros. Estos suplementos se presentan en diversas formas, como tabletas, gomas comestibles, polvos, líquidos, tés y barras.
A diferencia de los medicamentos, los suplementos alimenticios no están diseñados para tratar, prevenir, diagnosticar o curar enfermedades. No se someten a los mismos rigurosos requisitos de pruebas que los medicamentos. En el caso de los omega-3 existen diferentes opciones, unas con receta y otras de venta libre. Los primeros, generalmente son prescritos a personas con problemas de niveles altos de colesterol en sangre.
6SÍNTOMAS ASOCIADOS A ESTOS MEDICAMENTOS
La OCU destaca que los medicamentos a base de omega-3 pueden ocasionar efectos adversos según lo indicado en el prospecto, siendo los más comunes la indigestión y las náuseas. Además, pueden provocar gastroenteritis, mareos, alteraciones del gusto, reacciones alérgicas, entre otros.
La confirmación de la EMA agrega que estos fármacos pueden causar fibrilación auricular en personas con enfermedad cardiovascular o factores de riesgo como obesidad, colesterol elevado, hipertensión, diabetes o tabaquismo.