Telefónica ha realizado una propuesta inicial para que abandone la empresa un tercio de la plantilla, contabilizada en más 19.000 personas. Más de la mitad de los trabajadores propuestos para irse de la empresa proceden de las comunidades autónomas de Madrid y Cataluña. Sin embargo, las salidas recorren y afectan a trabajadores mayores de 55 años de todas las regiones y provincias de España. Cada una de ellas mira con lupa en número de empleados que acabarán engrosando las filas del paro en su territorio, un plato que no es del gusto para nadie. Solo las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla se libran de los despidos.
Este lunes Telefónica puso sus cartas boca arriba y descubrió que tenía la intención de despedir mediante un ERE a 5.124 trabajadores, aunque cabe la posibilidad que finalmente la cifra se rebaje bastante, tras finalizar las negociaciones. 4.085 despidos se producirán en Telefónica de España, 958 Telefónica Móviles y 81 en Telefónica Soluciones, la menos afectada. Se van a ver afectadas las personas nacidas en 1968 y años anteriores, con una antigüedad mínima de 15 años, por lo que el despido será para las personas de 55 años de edad en adelante. La cuestión es si el ERE será voluntario. «La empresa destaca por su capacidad de diálogo y las condiciones que ofrece», remarcan fuentes de la compañía sobre este tema.
LAS REGIONES Y LAS SALIDAS
No hay ninguna región española que se libre. Los centros de trabajo de la multinacional en Madrid acumularán 1.580 despidos, el 30,84% del total y en toda Cataluña, las cuatro provincias, se irán a casa 777 personas, 15,16% de los despidos propuestos. Por orden de mayor número de despidos, la afectación a los empleos en el resto de comunidades comenzaría en las ocho provincias andaluzas, donde se ha propuesto la salida de 691 personas, el 13,49% del total de los despidos y continuaría en la Comunidad Valenciana, donde el «excedente» de empleados se cuantifica en 343, con un 6,69% del total de los propuestos.
No hay ninguna región española que se libre. Los centros de trabajo de la multinacional en Madrid acumularán 1.580 despidos, el 30,84% del total y en toda Cataluña, las cuatro provincias, se irán a casa 777 personas, 15,16% de los despidos
Le siguen en la lista la comunidad de Galicia, donde se quedarán sin empleo 339 personas, es decir un 6,62% de la plantilla total de la empresa, después Castilla y León, donde abandonarán la empresa 286 empleados, lo que suma un 5,58% del total, y Euskadi, donde perderán el trabajo 255 empleados, un 4,98% de los más de 5.000.
La lista la continúa Asturias, con 140 trabajadores que se van fuera (el 2,73%), las Islas Canarias, donde abandonarán la empresa 136 empleados y serán el 2,65% del conjunto de despedidos, continúa la lista con las tres provincias aragonesas, con 128 empleados señalados y un 2,5% del conjunto nacional, y Castilla-La Mancha, donde se quedan sin empleo 119 personas, que suponen el 2,32% de la cifra total.
El ERE afectará en algunos territorios por debajo de los 100 empleos. Este es el caso de regiones como Murcia, donde finalizarán su relación con la teleco 90 trabajadores, es decir, el 1,76% del expediente, en las Islas Baleares, donde se ha señalado a 77 empleados y suponen el 1,5% del total, en Extremadura donde «solo» se irían 76 personas y suponen el 1,48%, y finalizan el listado Cantabria, Navarra y La Rioja, de donde se propone la salida de 42, 36 y 9 empleados respectivamente con un porcentaje de 0,82, 0,7 y 0,18 del total de la dura medida laboral.
LAS CAUSAS OBJETIVAS DE TELEFÓNICA
Telefónica justifica la espectacular (por la cifra) medida anunciada por «causas objetivas de carácter productivo, organizativo y técnico» y lo atribuye a un «excedente funcional» cuyas causas son la modificación de los servicios de la empresa, la finalización del despliegue de fibra óptica hasta el hogar (FTTH), el cierre del cobre y a otros elementos, así como la automatización de procesos, todos relacionados con los avances de las nuevas tecnologías.
No obstante, según apuntan fuentes sindicales, ese elevado excedente funcional que señala la empresa en las memorias puede acometerse desde diversas medidas de acción que resultarían menos agresivas, como son la recalificación y cambio de actividad, a través de ‘upskilling’ y/o ‘reskilling’, las internalizaciones y las bajas propiamente dichas en el ERE, que serán «inevitablemente inferiores en número».
las causas del ERE son la modificación de los servicios de la empresa, la finalización del despliegue de fibra óptica hasta el hogar (FTTH), el cierre del cobre y a otros elementos, así como la automatización de procesos
En cualquier caso, pese a la espectacularidad de la cifra inicial, el objetivo de los sindicatos es que el ERE tenga un carácter voluntario, tal y como ha ocurrido en los anteriores procesos de reestructuración laboral de la compañía, sobre todo con los Planes de Suspensión Individual (PSI). Con esta fórmula, basta con que se pongan de acuerdo para llevarla a cabo la dirección y los sindicatos, a diferencia del ERE, que debe ser supervisado por la Inspección de Trabajo. El anterior ERE de Telefónica en España se realizó en 2011 y supuso la salida de unos 6.800 trabajadores.
Las próximas reuniones entre Telefónica y los tres sindicatos con representación en la compañía (UGT, CCOO y Sumados-Fetico) están previstas para el próximo lunes, 11 de diciembre. El plan de salidas de Telefónica se da simultáneamente a las negociaciones del nuevo convenio colectivo, el III, para los trabajadores de la empresa que sustituirá al actual, cuya validez finaliza el próximo 31 de diciembre. El sindicato UGT ha insistido desde el comienzo de las negociaciones no habrá acuerdo en el ERE si no hay acuerdo en el convenio que blinde garantías y estabilidad.