La Dirección General de Tráfico (DGT) continúa invirtiendo en tecnología para mejorar la vigilancia vial. Desde sistemas de cámaras de alta precisión hasta radares inteligentes, la innovación permite detectar infracciones de forma más efectiva. El uso de drones, cámaras de reconocimiento de matrículas y dispositivos móviles avanzados amplía la capacidad de control en diferentes entornos. Esta inversión tecnológica fortalece la capacidad de hacer cumplir las normativas, disuadiendo comportamientos de riesgo en las carreteras y promoviendo una conducción más segura. Un ejemplo de ello es el caso inteligente del que te hablamos a lo largo de este artículo.
3Se trata de un encargo a la empresa Livall
Livall recibió un encargo para desarrollar un casco inteligente por parte de la DGT. La compañía se ha destacado por su innovación en tecnología para ciclistas y motoristas. Este encargo representa un voto de confianza en su experiencia y capacidad para crear dispositivos de alta calidad que mejoren la seguridad en carretera. Con este proyecto, Livall tiene la oportunidad de consolidar aún más su posición como líder en el mercado de cascos inteligentes, proporcionando soluciones avanzadas y efectivas para los conductores.