Siempre queremos simplificarnos las cosas y con los alimentos más. En nuestra búsqueda constante por simplificar la vida y conservar alimentos, la congelación se ha convertido en una práctica común en la mayoría de los hogares. Sin embargo, detrás de la aparente conveniencia, se esconde un secreto que muchos desconocen: hay alimentos que nunca deberíamos congelar, a pesar de que inadvertidamente lo hacemos.
8Pon atención a los siguientes consejos
Para asegurar una congelación adecuada, aquí hay algunos consejos prácticos que vale la pena tener en cuenta:
1. Protección esencial: los alimentos deben estar debidamente protegidos. Utiliza recipientes, bolsas, papel de aluminio o papel transparente diseñados para uso alimentario.
2. Envases apropiados: opta por envases estrechos y planos. Esto facilita la congelación rápida del centro del alimento. Además, divide grandes cantidades en porciones para lograr una congelación uniforme y rápida, y facilitar la descongelación de la cantidad exacta que planeas consumir.
3. Líquidos y vegetales crudos: si congelas líquidos, deja espacio libre, ya que el volumen se expande durante la congelación. Para vegetales crudos, es recomendable escaldarlos antes de congelarlos.
4. Etiquetado claro: etiqueta cada envase con la fecha de congelación, el tipo de alimento y la cantidad. Esto te permitirá conocer fácilmente el contenido y gestionar mejor tus reservas congeladas.
5. Precongelado inteligente: después de cocinar un plato, refrigéralo durante 1-2 horas antes de congelarlo. Este paso asegura una congelación más rápida, preservando la calidad del producto.
6. Límite de tiempo: por razones de calidad, se desaconseja conservar alimentos congelados en el hogar durante más de 3 meses. En el caso de alimentos comprados congelados, respeta las fechas indicadas por el fabricante, ya que después de ese tiempo podrían desecarse y experimentar otras alteraciones debido al frío.