Siempre queremos simplificarnos las cosas y con los alimentos más. En nuestra búsqueda constante por simplificar la vida y conservar alimentos, la congelación se ha convertido en una práctica común en la mayoría de los hogares. Sin embargo, detrás de la aparente conveniencia, se esconde un secreto que muchos desconocen: hay alimentos que nunca deberíamos congelar, a pesar de que inadvertidamente lo hacemos.
4Los primeros que no puedes congelar son los huevos
En primer lugar, los huevos con cáscara encabezan la lista de no congelables. El líquido dentro de la cáscara se expande al congelarse, amenazando con quebrarla y dejarnos con una textura gomosa al descongelar. Si la idea es congelar huevos, lo mejor es separar claras y yemas antes de almacenarlas en recipientes adecuados.
En el mundo de las frutas, aquellas con piel gruesa y alto contenido de agua, como pepinos y sandías, no deben pasar por el congelador. Contrario a la creencia popular, congelar frutas en general tampoco es una práctica recomendada, ya que su alto contenido líquido compromete su textura y sabor.