Las gasolineras low-cost parece que nos resolvieran un problema, que es rebajarnos el coste de la gasolina ¿o no es así y lo barato sale caro al final? En el vertiginoso mundo de la movilidad, donde el precio del combustible y la eficiencia del vehículo se entrelazan en la ecuación diaria de millones de conductores, surge una pregunta que despierta inquietudes y alimenta la especulación.
2Se trata de un mito, ya que esa gasolina pasa por controles
Es importante destacar que, en España, país donde se ha planteado la cuestión sobre si las gasolineras baratas o low-cost añaden agua al combustible, existe un suministrador único de carburante: la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH). Esta entidad juega un papel crucial en la distribución de combustibles, asegurando que el producto que llega a las estaciones de servicio cumpla con los requisitos de calidad y seguridad.
La idea de que las gasolineras de bajo costo adulteran su combustible con agua puede derivar de la falta de comprensión sobre los procesos de control y regulación establecidos por las autoridades. Estos controles, respaldados por la existencia de un suministrador único, proporcionan un marco sólido para garantizar que el combustible mantenga los estándares de calidad necesarios.