Fernando Ferrando puede presumir de una trayectoria de órdago: ingeniero industrial de formación, es también licenciado en Ciencias Económicas; y entre los cargos que ha ostentado se encuentran el de responsable de planificación de energías renovables del CIEMAT, director general de Gamesa Energía y director general de Energías Renovables de Endesa, entre otros. Este abrumador currículum en los sectores público y privado le permite afirmar, sin pelos en la lengua, que Francia «nos ha metido un gol» en la reforma eléctrica europea o que el corredor de hidrógeno renovable H2Med es un proyecto «faraónico y sin sentido». El ahora presidente de la Fundación Renovables desgranó éstas y otras ‘perlas’ en su diálogo con MERCA2.
MERCA2: Muchos análisis, entre ellos el suyo, afirman que los precios eléctricos cercanos a cero euros que hemos visto en las últimas semanas, resultado de la alta generación ‘verde’, acabarán haciendo quebrar la industria. ¿Las renovables pueden ‘morir de éxito’?
Fernando Ferrando: Si no se dan las condiciones adecuadas de acompañamiento, sí. Ese acompañamiento pasa por electrificar la demanda, hacerla gestionable -mediante la promoción del vehículo eléctrico, por ejemplo- y el aumento de la capacidad de almacenamiento.
M2: ¿Qué significa para las renovables el acuerdo para la reforma eléctrica de la Unión Europea (UE)?
FF: Sigue siendo un mero parche. Es cierto que se han introducido mejoras en los mecanismos de contratación, como los contratos a largo plazo y los PPA, pero el europeo sigue siendo un mercado marginalista sin sentido alguno para las fuentes de generación renovables, que tienen un coste de producción muy bajo. El sistema que impera está pensado para las energías que tienen costes muy altos, lo que provoca que el ahorro en la generación eléctrica no se traslade al consumidor final.
«LA CONTAMINACIÓN NO SE LIMITA A LO QUE SE VE Y SE HUELE; LOS RESIDUOS DE LAS CENTRALES NUCLEARES PERMANECEN MILES DE AÑOS»
M2: ¿Qué opina de la intransigencia del pacto PSOE-Sumar respecto al cierre de las centrales nucleares?
FF: La raíz del problema está en Europa: la Comisión Europea (CE) ha etiquetado a la energía nuclear como sostenible, lo cual es una barbaridad. Los elementos de contaminación no se restringen a lo que se ve o se huele; los residuos procedentes de las centrales nucleares permanecen en el ecosistema durante miles de años.
M2: La transición energética es una prioridad, pero garantizar el suministro también lo es. ¿Se pueden conjugar ambas tareas sin las nucleares?
FF: Rotundamente sí. Esta misma semana hemos llegado a precios eléctricos cercanos al cero con la mitad del parque nuclear parado. No solo se puede prescindir de la energía atómica, es que se debe.
M2: ¿Es justo el impuesto extraordinario a las energéticas? ¿Tiene razón Repsol en ‘plantarse’ y amenazar con llevarse sus inversiones fuera de España?
FF: Desde que en junio de 2021 Rusia empezó a alterar el mercado gasista, mucho antes de la invasión a Ucrania, se ha producido una transferencia de la renta del consumidor a las empresas energéticas. El impuesto, siendo justo, es la evidencia de que ni la UE ni España han sido capaces de atajar las injusticias del sistema. Y este impuesto, hay que decirlo, está vigente en muchos países de la Unión.
EL ‘DUMPING’ CHINO Y LA ENCRUCIJADA DE LAS RENOVABLES
M2: ¿Qué le falta al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) en el ámbito renovable? Se peca de poca o de demasiada ambición?
FF: El borrador del PNIEC es muy ambicioso en términos de potencia a instalar y muy poco operativo para que esa instalación pueda llevarse a cabo. Si no incrementas el consumo eléctrico potencial y la demanda es insuficiente, no podrás instalar más potencia.
M2: La propia ministra de transición ecológica, Teresa Ribero, ha dicho que en el sector solar se venden componentes por debajo del precio de coste. Todos sabemos que se refería a los productos chinos. ¿Hay alguna manera viable de competir con eso?
FF: Aquí entramos en un dilema tremendo. Por un lado, los consumidores pueden disfrutar de energía más barata, porque los promotores gastan menos en componentes para las instalaciones; pero los industriales autóctonos que fabrican esos componentes, y no pueden ponerlos a precios tan bajos, se van a hacer puñetas. En el sector fotovoltaico, y en menor medida el eólico, estamos hablando de un auténtico dumping que está destrozando los balances de empresas tan importantes como Siemens Gamesa. La solución pasa por que la UE imponga aranceles y conceda a los bienes de equipamiento renovable la categoría de recursos estratégicos. No solo hay que conseguir la autonomía energética, sino también la autonomía industrial. ¿Qué es preferible, comprar petróleo a los saudíes o producirlo tú mismo si tienes la posibilidad?
«EL H2MED ES UN PROYECTO TAN FARAÓNICO COMO CARENTE DE SENTIDO. HACER INFRAESTRUCTURAS SIN DEMANDA SUFICIENTE ES LANZARSE A UN POZO NEGRO»
M2: Hablemos del hidrógeno renovable. No faltan las voces que dudan de su viabilidad comercial…
FF: El hidrógeno es la guinda del pastel de las renovables, no el pastel. No cabe duda que tiene mucho potencial en áreas como la industria y el transporte, especialmente el de grandes cargas, pero ahora mismo su coste de producción está cerca del de los hidrocarburos. Es una tecnología que está en los albores de su desarrollo, aunque el CEO de Enagás [Arturo Gonzalo] no se entere.
M2: ¿Está diciendo que el H2Med no será la panacea que venden?
FF: Según el estadio de desarrollo en que se encuentra la industria del hidrógeno renovable, el H2Med es un proyecto tan faraónico como carente de sentido. En España el 70% de las 500.000 toneladas de hidrógeno que se utilizan está ligado a refinerías, pero viene el señor Arturo Gonzalo y decide que vamos a canalizar dos millones de toneladas a través de ese corredor, a pesar de que la ‘hoja de ruta’ para la implantación de ese material habla de 130.000 toneladas más. Hacer infraestructuras sin contar con la demanda adecuada es lanzarse a un pozo negro, y lo que quiere hacer Gonzalo es duplicar las previsiones del PNIEC. Lo único que va a sacar España del H2Med es que Francia nos ‘cuele’ el hidrógeno ‘rosa’ producido por los electrolizadores de sus centrales nucleares.
M2: Terminemos con un poco de ciencia ficción; con más de lo primero que de lo segundo, eso sí. ¿Qué futuro le ve a la fusión nuclear?
FF: Acabé la carrera de la ingeniería en el 79 y entonces decían que a la fusión le quedaban 50 años para revolucionar el panorama; ahora dicen que le quedan otros 50. La fusión nuclear es el futuro que nunca es presente; como la zanahoria del burro.