Ainsa es un pueblo conocido como el «último» de los reinos medievales españoles. Situado en la provincia de Huesca, en el Pirineo aragonés, Ainsa ha sido testigo de la historia española desde la Edad Media. Esta pequeña ciudad posee un tesoro de patrimonio histórico que la hace única en su clase. Un recorrido turístico por Ainsa revelará una colección de edificios con diferentes estilos arquitectónicos, desde la arquitectura renacentista hasta la arquitectura barroca, y una variada riqueza de arte y cultura.
Durante un recorrido por Ainsa, los turistas pueden disfrutar de la belleza natural que rodea el pueblo, desde los picos nevados del Pirineo hasta los cañones profundos del río Vero. El bosque y la vegetación abundantes también ofrecen excelentes vistas panorámicas. La gente de Ainsa también es conocida por su hospitalidad y la acogida que reciben los turistas.
5Las Cuevas de Sobrarbe
Las Cuevas de Sobrarbe están situadas a 20 kilómetros de Ainsa y son uno de los lugares más interesantes de la región. Esta cueva es uno de los mayores yacimientos de arte rupestre de Europa, con más de 500 pinturas rupestres datadas de entre 10.000 y 30.000 años.
Los visitantes pueden recorrer la cueva durante un recorrido guiado. La visita incluye la explicación de los diferentes estilos de arte rupestre, así como la historia de las personas que lo crearon. Esta cueva también es un lugar ideal para los amantes de la naturaleza, ya que se encuentra en un entorno espectacular rodeado de montañas y bosques.