Ainsa es un pueblo conocido como el «último» de los reinos medievales españoles. Situado en la provincia de Huesca, en el Pirineo aragonés, Ainsa ha sido testigo de la historia española desde la Edad Media. Esta pequeña ciudad posee un tesoro de patrimonio histórico que la hace única en su clase. Un recorrido turístico por Ainsa revelará una colección de edificios con diferentes estilos arquitectónicos, desde la arquitectura renacentista hasta la arquitectura barroca, y una variada riqueza de arte y cultura.
Durante un recorrido por Ainsa, los turistas pueden disfrutar de la belleza natural que rodea el pueblo, desde los picos nevados del Pirineo hasta los cañones profundos del río Vero. El bosque y la vegetación abundantes también ofrecen excelentes vistas panorámicas. La gente de Ainsa también es conocida por su hospitalidad y la acogida que reciben los turistas.
3Las ruinas de la iglesia de Santa María
Las ruinas de la iglesia de Santa María son uno de los principales atractivos de Ainsa. Esta iglesia fue construida en el siglo XIII como un templo de estilo gótico. Aunque la iglesia fue destruida durante un incendio en el siglo XVIII, todavía se conservan los restos de una de sus torres, así como algunos fragmentos de la fachada.
Las ruinas son un lugar increíble para los amantes de la historia y fotógrafos. El entorno paisajístico es impresionante y ofrece excelentes vistas a los alrededores. Los visitantes también pueden visitar la iglesia contigua, que se remonta al siglo XV.