La iluminación contaminada afecta al cielo nocturno y la vida silvestre. Se produce cuando se emite luces artificiales o luz difusa de manera innecesaria o excesiva desde luminares urbanos, destellos de televisión y pantallas de teléfonos móviles. Esta luz artificial afecta la vida silvestre de muchas maneras, desde alterar los ciclos de actividad hasta interesar el apareamiento de animales.
Además, la luz artificial reflejada en el cielo nocturno puede enturbiar la visibilidad, excluyendo la posibilidad de ver los cosmólogos y astros. La contaminación lumínica disminuye la calidad de vida humana en áreas urbanas, debido a la pérdida de un ambiente nocturno natural y relajante. Esto afecta a las actividades recreativas, como escuchar la naturaleza y bucear en el cielo.
Para restablecer la luz natural nocturna, se deben adoptar medidas para minimizar la contaminación lumínica. Aquí hay algunas de estas medidas:
1APAGAR LAS LUCES EN LUGARES QUE NO LAS NECESITEN
La contaminación lumínica se puede prevenir al apagar eficientemente las luces que no son necesarias. Esto incluye luminarias, destellos de televisores, dispositivos electrónicos o pantallas de teléfonos móviles. También debe considerarse el aclarado de ciertos parques, plaza y áreas parques recreativas nocturnas. Esto garantizará que los árboles produzcan suficiente sombra para disminuir la contaminación lumínica. Reducir el uso de luces desde edificios, despachos y viviendas contribuiría a la conservación del ecosistema y la biodiversidad nocturnos.
Las luces nocturnas también deben ser menos intensas para que así se ahorre energía. Si es necesario ofrecer luz de seguridad en un lugar, se recomienda instalar luces subterráneas con sensores de movimiento y temporizadores que apaguen la luz cuando no sea necesaria. De esta manera se hará un uso mucho más eficiente de la energía eléctrica.