La Giralda de Sevilla es uno de los monumentos más famosos de la ciudad. Está situada en la parte oeste de la Catedral de Santa María de la Sede. Esta torre tiene más de cinco siglos de antigüedad, aunque los restos del minarete que la precedía aún se conservan. Desde la Giralda se dominan unas espectaculares vistas panorámicas sobre la ciudad de Sevilla. Está considerada uno de los principales monumentos musulmanes de la España peninsular y, junto con la Catedral de la que forma parte, se considera uno de los enclaves patrimoniales más importantes de la ciudad andaluza.
Se trata de una imponente torre de 80 metros de altura, coronada con una hermosa giralda, obra del maestro artífice del Renacimiento, Hernán Ruiz el Mozo. Su construcción data del siglo XVI y a lo largo de los años se la ha ido restaurando poco a poco, conservando su estructura original y convirtiéndose en un símbolo representativo de todo Sevilla.
3PATRIMONIO HISTÓRICO

La Giralda tiene mucho que ofrecer a los amantes de la historia. El mismo aspecto de su construcción, emparentada con la última etapa de la hispanomusulmana, es un ejemplo recurrente de la hibridación cultural que tanto se caracterizó la región andaluza. El diseño arquitectónico de la Giralda también muestra claros vestigios de la influencia de la civilización romana con la utilización de los arcos fajones, mamparas y el friso bajo.
No obstante, la parte más importante de la Giralda son las referencias a su mezquita anterior. Esto se ve especialmente en la parte inferior de la torre, donde se conservan los restos de su minarete prerromano. Esta área, conocida popularmente como la Torre Vella, también custodia los famosos soportes andaluces que decoran su base externa, así como los sosiego de los árabes. Dentro de la Giralda, uno también puede encontrar muchas alfombras orientales de estilo islámico.