No te pierdas el genial accesorio de cocina que vende Lidl, amplía tu espacio y protege tu vitrocerámica

lidl vitrocerámica

La cocina es el corazón del hogar, pero a menudo se enfrenta al desafío del espacio limitado en la encimera. 

Para abordar este problema común, Lidl ha lanzado un innovador accesorio que no solo protege las vitrocerámicas de arañazos y daños, sino que también amplía el espacio de trabajo en la cocina. Este versátil y práctico accesorio, conocido como «cubre vitrocerámica», ha pasado desapercibido para muchos, pero su utilidad es innegable.

Aunque estos protectores de vitrocerámica están disponibles para diferentes tipos de placas, como las de gas e inducción, son especialmente apreciados por aquellos que poseen vitrocerámicas. La razón es evidente: las vitrocerámicas son más propensas a rayones y daños debido a su superficie lisa y delicada. Pero la protección de la placa no es su único beneficio, ya que también crean un espacio adicional en la encimera, lo que facilita la manipulación de alimentos y la preparación de comidas.

EL ACCESORIO IDEAL DE LIDL PARA LA VITROCERÁMICA

1024 2000 1 Merca2.es

El último hallazgo en este sentido proviene de Lidl, la cadena de supermercados alemana. En esta ocasión, han puesto a disposición del público un cubre vitrocerámica que es resistente a cortes y arañazos, siguiendo su tradición de proporcionar soluciones prácticas y económicas para el hogar. La noticia aún más emocionante es que cada juego de dos piezas tiene un precio increíble de solo 7,99 euros, lo que lo convierte en una inversión inteligente para cualquier cocina.

La simplicidad del mecanismo del cubre vitrocerámica es uno de sus puntos fuertes. Consiste en dos mitades que se colocan directamente sobre la placa de la vitrocerámica. Al hacerlo, la placa queda protegida de daños y arañazos, lo que prolonga su vida útil y mantiene su aspecto impecable. Pero eso no es todo; la verdadera magia de este accesorio radica en su capacidad para ampliar la superficie de trabajo en la encimera.

El material principal utilizado para su fabricación es el vidrio, que no solo es duradero, sino que también es fácil de limpiar. Además, el recubrimiento cuenta con una capa de papel que añade una capa extra de protección y permite que los alimentos se manipulen con seguridad. Para garantizar la estabilidad y la seguridad, el cubre vitrocerámica está equipado con pies antideslizantes de silicona que evitan deslizamientos accidentales y, por lo tanto, reducen el riesgo de accidentes en la cocina. Es importante destacar que esta superficie es inodora e higiénica, lo que la convierte en un entorno seguro para la manipulación de alimentos.

Cada una de las placas de cubre vitrocerámica disponibles en Lidl tiene medidas aproximadas de 52 cm de largo por 30 cm de ancho, lo que las hace adecuadas para una variedad de tamaños de vitrocerámicas. Además, para satisfacer las preferencias de diseño y decoración de cada cliente, este innovador artículo está disponible en tres modelos diferentes con estampados distintos: mármol, frutas y verduras. Esto permite que el accesorio se integre perfectamente en cualquier estilo de cocina y añada un toque de personalidad.

DIFICULTADES A LAS QUE SE ENFRENTAN LAS VITROCERÁMICAS

1024 2000 Merca2.es

Mantener las vitrocerámicas limpias y sin arañazos puede ser un desafío constante en la cocina. Aunque estas superficies son conocidas por su apariencia lisa y elegante, también son bastante delicadas y requieren un cuidado adecuado para mantener su aspecto y funcionalidad a lo largo del tiempo.

Una de las dificultades más notables de las vitrocerámicas es su susceptibilidad a los arañazos. Estas superficies suelen ser fabricadas con vidrio cerámico, que es un material relativamente suave en comparación con otros materiales de encimera, como el acero inoxidable o la piedra. Esto significa que son propensas a rayones causados por la abrasión de objetos afilados, como utensilios metálicos, o incluso partículas de suciedad y arena que pueden quedar atrapadas en los paños de limpieza.

Los residuos de alimentos quemados en la superficie de una vitrocerámica pueden ser un problema especialmente molesto. Si no se eliminan de manera adecuada, estos residuos pueden quemarse en la superficie, lo que no solo dificulta su limpieza, sino que también puede dejar manchas y marcas antiestéticas.

Otro desafío común es el uso incorrecto de productos de limpieza. Utilizar productos abrasivos, como limpiadores en polvo o estropajos metálicos, puede dañar irreparablemente la superficie de la vitrocerámica. Además, algunos limpiadores químicos fuertes pueden dejar residuos que requieren un esfuerzo adicional para eliminar, lo que puede aumentar el riesgo de rayones.

Las manchas persistentes, como las de grasa, pueden ser difíciles de eliminar. Estas manchas a menudo requieren un tratamiento especializado y más tiempo para limpiarlas por completo. Aunque menos común, las vitrocerámicas pueden romperse o astillarse si se cae un objeto pesado sobre ellas. Esto no solo puede representar un peligro, sino que también hace que la limpieza sea aún más difícil, ya que las astillas pueden acumularse y ser difíciles de eliminar sin causar más daños.

Con el tiempo, las áreas de la vitrocerámica que se utilizan con mayor frecuencia, como las zonas de cocción, pueden mostrar signos de desgaste. Esto puede manifestarse como una pérdida de brillo, manchas opacas o incluso decoloración en algunas áreas.

CONSEJOS PARA MANTENER LAS VITROCERÁMICAS EN BUEN ESTADO

lidl vitrocerámica

A pesar de estos desafíos, es posible mantener las vitrocerámicas limpias y sin arañazos con el cuidado y la atención adecuados. 

La limpieza regular es fundamental para mantener las vitrocerámicas limpias. Después de cada uso, espera a que la placa se enfríe y luego límpiala con un paño suave o una esponja no abrasiva. Esto ayudará a evitar que los residuos de alimentos y las manchas se acumulen y se vuelvan más difíciles de eliminar con el tiempo.

Los productos de limpieza diseñados específicamente para vitrocerámicas son ideales, ya que están formulados para eliminar manchas y residuos sin dañar la superficie. Estos productos suelen estar disponibles en forma de cremas o aerosoles. Siguiendo las instrucciones del fabricante, aplícalos sobre la superficie, déjalos actuar durante unos minutos y luego límpialos con un paño suave o una esponja no abrasiva.

Si prefieres una opción de limpieza más suave y económica, el agua caliente con un poco de detergente suave puede ser muy efectiva. Mezcla el detergente con agua caliente, sumerge un paño limpio o una esponja en la solución y limpia la vitrocerámica. Asegúrate de enjuagar y secar bien después de la limpieza para evitar dejar residuos.

Las manchas persistentes, como las de grasa quemada, pueden requerir un enfoque especial. Una pasta de bicarbonato de sodio y agua puede ser muy eficaz. Aplica la pasta sobre la mancha, deja actuar durante un tiempo y luego frota suavemente con un paño suave o una esponja. Luego, enjuaga y seca bien.

Para eliminar residuos secos o alimentos quemados, puedes usar un raspador específico para vitrocerámicas. Estos utensilios están diseñados para no dañar la superficie y son útiles para raspar suavemente los restos adheridos. Asegúrate de usar el raspador con cuidado y en un ángulo bajo para evitar rayar la placa.

Para prevenir arañazos y daños en la superficie de la vitrocerámica, evita utilizar utensilios de cocina metálicos directamente sobre la placa. En su lugar, utiliza utensilios de madera, plástico o silicona que sean menos propensos a causar daños. Siempre limpia los derrames y salpicaduras de inmediato, incluso cuando la placa todavía esté caliente. Los líquidos o alimentos derramados pueden quemarse en la superficie y ser difíciles de eliminar si se dejan reposar.

Puedes considerar el uso de protectores de vitrocerámica, como los cubre vitrocerámica mencionados en la noticia. Estos accesorios no solo protegen la placa de arañazos y daños, sino que también proporcionan una superficie adicional en la encimera para manipular alimentos de manera segura. Nunca utilices productos de limpieza abrasivos, como limpiadores en polvo o estropajos metálicos, ya que pueden rayar y dañar permanentemente la superficie de la vitrocerámica.