Elon Musk ve como sus competidores directos en la lista de los hombres más ricos de la tierra recortan distancias. Bernard Arnault, segundo hombre más rico del mundo y el tercero, Jeff Bezos, están a menos millones de distancia de Musk, que ocupa el primer puesto, tras perder este 16.000 millones de dólares (15.100 millones de euros) en un solo día, después de la brutal bajada de acciones de más de un 14% de Tesla en apenas 48 horas. Las acciones de Tesla cayeron un 9% el jueves, y un 4,7 % el miércoles, después de que el fabricante de vehículos eléctricos diera a conocer las decepcionantes ganancias de su empresa estrella en el tercer trimestre de este año.
ELON MUSK Y LA CAÍDA EN BOLSA
Esta caída en picado en bolsa se traduce de inmediato en una pérdida del patrimonio neto de Elon Musk de 16.000 millones de dólares en 24 horas. Esto no le impide en absoluto seguir siendo el ser humano más rico de mundo, ya que su fortuna se estima en más de 228 mil millones de dólares (algo más de 215.000 millones de euros). Para él es como si se le hubieran caído unas monedas por un agujero en el bolsillo del pantalón.
Sus inmediatos competidores en el ranking son Arnault, el ingeniero francés dueño del imperio del lujo LVMH (Louis Vuitton y Christian Dior entre otras marcas), apodado el «lobo de cachemira», con una fortuna de 164 mil millones de dólares (casi 155 mil millones de euros), y Bezos, dueño de Amazon, con una fortuna de 150 mil millones de dólares (142 millones de euros). Así, el histriónico dueño de X (antes Twitter) y de la empresa de aeronáutica que pretende llegar a la luna, SpaceX, podría tener tres días malos como el jueves y aun así conservar su primer puesto en el ranking de riqueza.
Musk es el ser humano más rico de mundo, ya que su fortuna se estima en más de 228 mil millones de dólares (algo más de 215.000 millones de euros)
Arnault ha superado a Elon Musk en alguna ocasión como persona más rica del mundo. Durante la esta última semana, el magnate de los artículos de lujo perdió brevemente el segundo lugar en la lista de ricos mundiales ante Jeff Bezos, pero poco a poco recuperó el puesto número dos. Bezos, fundador de Amazon, dueño de Blue Origin y de The Washington Post, ocupa un cercano tercer lugar.
A pesar de la debacle de este jueves, la riqueza Musk ha aumentado en unos 70.000 millones de dólares a lo largo de 2023, motivada principalmente por el repunte de las acciones de Tesla gracias a la gran capitalización que ha aumentado en general en las grandes empresas tecnológicas.
LA DEBACLE DE ELON MUSK EN BOLSA
Fue el pasado miércoles cuando Tesla hizo públicos sus ingresos del tercer trimestre de este año, que alcanzaban los 23.350 millones de dólares. Las ganancias por acción fueron de 0,66 dólares, lo que no llegaba hasta el valor esperado y consensuado por los analistas de 0,74 dólares. Las no ganancias del tercer trimestre de Tesla, que obviamente no cumplieron con las expectativas de Wall Street, se convirtieron en un desplome histórico justo después de que Elon Musk, en su papel de director ejecutivo de la marca, organizara una conferencia telefónica sobre sus ganancias que un analista de Wall Street denominó un «mini desastre», tal y como han informado en Bloomberg.
Los recortes de precios en los coches de la marca indican que la clientela no está dispuesta a pagar una prima por sus vehículos. Y aún bajando los precios se han vendido menos coches de lo que se esperaba. En esta época del año pasado, antes de los recortes de precios, Wall Street estimaba alrededor de dos millones de entregas de vehículos en 2023,lo que al final se redujo a 1,8 millones.
Los recortes de precios en los coches de la marca indican que la clientela no está dispuesta a pagar una prima por sus vehículos.
Las mentes preclaras de Wall Street entienden que, quizá, no tenga sentido una valoración bursátil tan elevada, sobre todo después de saberse los últimos resultados, que bajan el valor de la compañía en 70.000 millones de dólares. Los analistas han llegado a decir que «la valoración de Tesla parece cada vez más insostenible«.
Según los analistas de la bolsa neoyorquina, para justificar el precio de las acciones de Tesla, los inversores tienen que creer que «pueden lograr volúmenes muy altos y márgenes operativos elevados, similares a las empresas de tecnología o software, no a las empresas automotrices tradicionales. También apuntaron a que, con la fluctuación del precio de los vehículos eléctricos a la baja, incluso en las marcas chinas, Tesla «se parece cada vez más a una empresa automovilística normal«.
La empresa de Elon Musk puede tardar todavía décadas en poner en marcha su software de conducción autónoma, y no será un actor dominante en el sector del vehículo autónomo, si no mantiene su reinado en la industria del coche eléctrico, donde la competencia está empezando a ser voraz.
