Cuando nos encontramos en el supermercado y nos enfrentamos a la elección entre mantequilla y margarina, es común que surjan dudas acerca de cuál es la mejor opción. A simple vista, ambas parecen similares en sabor, pero la mayor diferencia radica en su origen. Para ayudarte a tomar una decisión informada, hemos consultado a dos expertos para analizar qué aspectos debemos tener en cuenta.
5La mantequilla tiene grasas saturadas
La mantequilla, aunque es un producto natural, tiene un alto contenido de grasas saturadas, lo cual puede tener un impacto negativo en la salud cardiovascular. Jillian Kubala, una dietista de Nueva York, destaca que la mantequilla es conocida por su sabor rico y cremoso, pero su composición incluye grasas saturadas, las cuales están asociadas con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas si se consumen en exceso.
Es importante tener en cuenta que el consumo excesivo de grasas saturadas puede ser perjudicial para la salud. Por lo tanto, es recomendable optar por alternativas más saludables, como la margarina elaborada con aceites insaturados. Sin embargo, es fundamental leer las etiquetas y elegir margarinas que sean bajas en grasas trans y que contengan aceites vegetales saludables.