Si alguna vez has experimentado ese incómodo y fastidioso flato mientras intentabas mantener tu ritmo en una carrera, una sesión de entrenamiento o incluso una caminata enérgica, sabes lo molesto que puede ser. El flato, también conocido como dolor de costado, puede arruinar tu entrenamiento y desmotivarte rápidamente. Pero no te preocupes, en este artículo descubrirás estrategias efectivas y consejos prácticos para evitar el flato durante el ejercicio. Aprenderás no solo por qué ocurre, sino también cómo puedes prevenirlo y mantener tu rendimiento físico en su punto máximo. ¡Sigue leyendo y dile adiós al fastidioso flato!
3Algunos estudiosos tienen una opinión
Un grupo de autores sostiene que el flato surge debido a la falta de riego sanguíneo en la zona abdominal durante el ejercicio. Otros argumentan que son los gases generados en el intestino como resultado de la digestión los culpables. Además, algunos sugieren que la tensión y la contracción de los ligamentos encargados de mantener los órganos en su lugar durante la actividad física podrían ser desencadenantes del proceso. Incluso se ha postulado que el esfuerzo adicional que el diafragma realiza para controlar la respiración y la postura corporal de manera simultánea podría jugar un papel importante.
