Artículo de T. Rowe Price elaborado por su gestor de fondos Shinwoo Kim, que gestiona la estrategia global de renta variable de recursos naturales en la firma, sobre las implicaciones en el petróleo de la guerra entre Israel y Hamás.
La guerra entre Israel y Hamás es una situación muy dinámica. Nuestros pensamientos están con los afectados por esta tragedia, y esperamos que el conflicto se resuelva pronto.
En cuanto al impacto inmediato en los mercados financieros mundiales, hasta la fecha ha sido relativamente moderado. En nuestra opinión, el principal riesgo para la economía mundial afecta a los mercados del petróleo, sobre todo si el conflicto se extiende a otras partes de la región.
En medio de las presiones a corto plazo, es probable que los motores seculares permanezcan intactos.
La guerra entre Israel y Hamás podría tener implicaciones más amplias que Oriente Medio. La situación es muy dinámica, y el coste humano del conflicto seguirá siendo, con razón, la principal preocupación. Nuestros pensamientos están con los afectados por esta tragedia, y esperamos que el conflicto se resuelva pronto.
El impacto inmediato en los mercados financieros mundiales ha sido relativamente moderado. El principal riesgo para la economía mundial son los mercados del petróleo, sobre todo si el conflicto se extiende a otras partes de la región.
El encarecimiento del petróleo afectaría al poder adquisitivo de los consumidores y podría alimentar la inflación, lo que complicaría las decisiones de los bancos centrales que habían previsto ralentizar o suspender las medidas de endurecimiento monetario. Un periodo prolongado de precios elevados de la energía podría, por ejemplo, persuadir a algunos bancos centrales a mantener los tipos más altos durante más tiempo.
LOS RIESGOS PODRÍAN SEGUIR SIENDO ELEVADOS
A corto plazo, el precio del petróleo puede seguir siendo elevado mientras los mercados evalúan el impacto en las cadenas de suministro de materias primas.
Aunque el riesgo directo para el mercado del petróleo puede no parecer tan grave, ya que Israel produce una cantidad insignificante del suministro mundial de petróleo, el riesgo indirecto para el mercado del petróleo desde el punto de vista de la oferta es que Irán pueda verse implicado en la guerra, lo que daría lugar a un refuerzo agresivo de las sanciones a las exportaciones de petróleo iraní. Esto podría empujar los precios al alza, sobre todo teniendo en cuenta que el mercado ya está tenso.
Aunque la OPEP tiene capacidad para compensar la pérdida de exportaciones iraníes, no está del todo claro que vaya a hacerlo, dada la compleja dinámica geopolítica de Oriente Próximo.
También somos conscientes de que el conflicto podría afectar a los precios del gas natural a corto plazo. Israel ha manifestado su intención de cerrar los yacimientos de gas natural y, dado que el país se abastece de aproximadamente el 1,5% del suministro mundial, la reducción podría repercutir en los mercados de fuera de la región. Las presiones sobre los precios podrían repercutir en los precios del gasóleo y los fertilizantes, que vigilaremos de cerca en el próximo periodo.
La historia demuestra que estos conflictos suelen afectar a los precios de las materias primas en plazos más cortos, pero no suelen desbordar los motores a largo plazo que sustentan los ciclos de las materias primas. La productividad y las curvas de costes siguen siendo los principales motores de los mercados alcistas y bajistas seculares de las materias primas, y esperamos que siga siendo así.
Seguimos vigilando la situación para comprender las repercusiones inmediatas y a largo plazo en los mercados mundiales y en nuestras carteras de inversión.
EL PETRÓLEO SE MANTIENE AL ALZA
El contrato de futuros sobre el petróleo ligero estadounidense tipo West Texas con próximo vencimiento en octubre tiene un precio de 86,16 dólares, lo que supone una revalorización del 7% en lo que llevamos de año, pero de un 14% en los últimos tres meses.
Por el lado europeo, el contrato de futuros sobre el crudo de referencia en Europa, el Brent, con próximo vencimiento en octubre tiene un precio de casi 90 dólares, lo que supone una revalorización del 12% en los últimos tres meses y del 5,7% en la última semana. La subida es el 3,8% en lo que llevamos de año. Los próximos vencimientos se mantienen por encima de los 89 dólares hasta enero.