En torno a un 30% de la población en España sufre algún tipo de alergias. Muchas de estas pueden experimentar síntomas más intensos, como por ejemplo tos seca, lagrimeo, estornudos, picazón de garganta y dificultades respiratorias. Estos síntomas no revisten gravedad, pero puede afectar mucho a la calidad de vida y eliminar el día a día del paciente.
Afortunadamente, existen varios medicamentos eficaces para tratar estos incómodos síntomas, como colirios, antihistamínicos, analgésicos y medicamentos para el resfriado. El problema es que algunos de estos medicamentos pueden tener efectos secundarios que afectan las actividades diarias, como conducir. Desafortunadamente, muchos conductores no son conscientes del riesgo que implica conducir mientras se toman medicamentos de este tipo, que entre otras cosas, pueden provocar una fuerte somnolencia. Entonces, ¿qué debemos hacer?
2¿QUÉ PASA SI ESTORNUDAMOS CONDUCIENDO?
Cuando un conductor estornuda mientras conduce a una velocidad de 90 km/h, se estima que el vehículo recorre más de 125 metros sin control. En caso de que el conductor experimente una serie de estornudos consecutivos mientras el vehículo se desplaza a 100 km/h, esta distancia aumenta a 140 metros. Además, si el tiempo que el conductor está estornudando se prolonga durante 10 segundos o más, la distancia de recorrido sin control del vehículo se multiplicará considerablemente, lo que podría aumentar significativamente el riesgo de sufrir un accidente de tráfico. Por lo tanto, es crucial que los conductores tomen medidas para prevenir o controlar las alergias y evitar situaciones que puedan comprometer su seguridad y la de otros usuarios de la vía.