La industria tabacalera ha centrado su atención en la infancia como nuevo objetivo. Han lanzado al mercado un innovador producto dirigido a este público: vapeadores especialmente diseñados para los más pequeños. A simple vista puede parecer un juguete infantil que replica algún personaje famoso de animación, pero en realidad se trata de cigarrillos electrónicos diseñados para captar la atención de los niños. Incluso tienen un sabor que recuerdan a chuches.
Estos productos se venden en Internet sin ninguna advertencia sanitaria. Detrás de esta estrategia se encuentra la industria del tabaco, que busca atraer a los menores de edad con la intención de convertirlos en futuros fumadores, advierte Andrés Zamorano, presidente del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT).
5EL CIGARRILLO ELECTRÓNICO NO ES INOCUO
El uso cada vez más extendido de dispositivos modernos para fumar, como los vapeadores y cigarrillos electrónicos, ha generado la falsa percepción de que pueden servir como una alternativa efectiva para abandonar el hábito de fumar. Sin embargo, numerosos estudios han demostrado que en realidad pueden llevar al consumo de tabaco y que son pocos los fumadores que logran reemplazar completamente los cigarrillos tradicionales por el vapeo, y aún menos los que logran mantener este cambio de manera definitiva.
Los cigarrillos electrónicos, que llegaron al mercado en 2016, carecen de investigaciones exhaustivas sobre sus efectos a largo plazo. No obstante, se ha comprobado que poseen efectos nocivos a corto plazo. De hecho, se han descubierto sustancias cancerígenas en los líquidos y aerosoles utilizados en estos dispositivos.