Las acciones de Nvidia, el mayor fabricante de chips de IA de mundo, han subido como la espuma, pese a que la Unión Europea examina si hay abuso del mercado de los semiconductores por parte del fabricante. La subida en la bolsa de Nvidia se produce después de que Goldman Sachs agregara a la compañía a su «Lista de Convicciones de América», lo que deja ver que es Nvidia es una compañía muy valorada por el banco de inversión.
Los analistas del banco mejoraron el estado de Nvidia desde una calificación de «Comprar» asignada a finales de agosto, manteniendo al mismo tiempo un precio objetivo de 605 dólares por acción. Este martes, las acciones subían más de tres puntos porcentuales y cotizaba en torno a los 450 dólares.
Su excelente posición en el mercado choca con las suspicacias de la Unión Europea (UE), que de nuevo pone el foco en una empresa tecnológica norteamericana por supuestas prácticas anticompetitivas en chips utilizados para la revolucionaria Inteligencia Artificial (IA), tal y como ha publicado Bloomberg.
BRUSELAS MIRA A NVIDIA CON RECELO
Bruselas, por el momento, solo está recopilando información de manera informal sobre prácticas potencialmente abusivas en el sector de las unidades de procesamiento de gráficos (GPU), que se utilizan tanto para la IA como para otro de los mercados más boyantes del mundo, los videojuegos. La investigación podría, en el futuro, desembocar en una intervención para evitar actitudes monopolistas en el mercado por parte de la marca de semiconductores.
grandes empresas tecnológicas han sido objeto de estudio y denuncias por supuestas prácticas desleales, tanto en Europa como en EE.UU
Como se recordará, esta no es la primera empresa tecnológica cuestionada por prácticas abusivas de monopolización del mercado. En las últimas semanas, grandes empresas tecnológicas han sido objeto de estudio y denuncias por supuestas prácticas desleales, tanto en Europa como en EE.UU; Google ha sido acusada de crear un monopolio mediante el uso de contratos de exclusividad con fabricantes de dispositivos, Microsoft, que, a principios de siglo, también fue acusado de prácticas abusivas, ahora señala al buscador de Cupertino como el culpable de perjudicar a su motor de búsqueda, Bing.
Amazon es la otra gran tecnológica que debe demostrar que no ha estado involucrada en una serie de «estrategias entrelazadas anticompetitivas e injustas para mantener ilegalmente su poder», tal y como consta en la acusación a la que se enfrenta estos días por parte de la Comisión de Comercio de Estados Unidos.
Y es que Nvidia es ahora mismo el principal proveedor de chips de las grandes compañías tecnológicas globales, tanto de software como de servicios cloud. Entre sus clientes están empresas como Salesforce, ServiceNow, AWS, Google Cloud y Microsoft. Ya en febrero, el fabricante hizo públicos sus planes para enviar DGX Cloud, que combina los sistemas informáticos basados en GPU de las empresas, llamados DGX Pods, con una pila de software empresarial de IA, a Oracle, Google Cloud y Microsoft.
EL IMPULSO DE GOLDMAN SACHS
Aunque tiene competidores, como es el caso de AMD, la startup Ampere, en la que acaba de invertir Oracle 400 millones de dólares, Nvidia supera cualquier perspectiva. Ahora mismo, sus ventas suponen ya el 76% de sus ingresos totales.
Goldman Sachs ha previsto que la compañía va a mantener su posición de liderazgo en el mercado, y los factores clave para ello son, por un lado, la evidente ventaja competitiva del fabricante de chips, y por el otro, la creciente complejidad de los modelos de IA desarrollados por los clientes. La entidad financiera también ha señalado como punto a favor que las limitaciones de suministro han comenzado a aliviarse y, además, se espera que persista la solidez del negocio de centros de datos de Nvidia.
La empresa de microchip muestra una sólida situación financiera. Cuenta con una capitalización del mercado de 1.070.000 millones de dólares e ingresos de 32.680 millones; su margen de beneficio bruto es del 64,62% y tiene unos ingresos operativos de 10.800 millones de dólares. Según Goldman Sachs, «las empresas de semiconductores son las beneficiarias más directas de la IA generativa debido a la enorme potencia informática necesaria para impulsar algoritmos de modelos de gran lenguaje (LLM)».