Si te saltas un semáforo, la DGT te impondrá una sanción y de las gordas. En nuestra sociedad actual, la seguridad vial se ha convertido en un tema de suma importancia. Con el objetivo de garantizar la protección de todos los usuarios de las vías, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha implementado una serie de normas y reglamentos que deben ser acatados por todos los conductores.
5Hay escenarios en los que es posible recurrir de una sanción de la DGT
Si bien es cierto que la Dirección General de Tráfico implementa medidas para garantizar la seguridad vial, no todos los casos de infracción son irrefutables. En el supuesto de que un vehículo rebasara la línea de detención, la multa de 200 euros y la retirada de cuatro puntos en el carnet de conducir podrían parecer una sanción automática e indiscutible. Sin embargo, existen diferentes escenarios en los que los conductores tienen la posibilidad de recurrir esta sanción.
Uno de los escenarios más comunes es aquel en el que no se pueda observar con nitidez si el semáforo estaba en rojo en el momento en que el vehículo rebasó la línea de detención. Los conductores pueden argumentar que la visibilidad en ese momento era deficiente, ya sea debido a condiciones climáticas adversas, como una fuerte lluvia o neblina, o a problemas en la iluminación del semáforo. La falta de claridad en este aspecto puede hacer que la multa sea considerada injusta, ya que el conductor no tenía una visión clara del color del semáforo.