La dieta baja en carnes rojas una excelente opción para mejorar tu salud cardiovascular y reducir el riesgo de ciertos problemas de salud. Después de todo, los estudios muestran que una dieta que incluya un consumo moderado de carnes rojas, está vinculada con un menor riesgo de enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.
A continuación veremos algunos consejos para seguir una dieta baja en carnes rojas y disfrutar de los innumerables beneficios.
4Pescado, huevos y productos lácteos
Además de variadas frutas y verduras, frutos secos y granos integrales, una dieta baja en carnes rojas incluye productos tales como pescado, huevos y productos lácteos. El pescado es una excelente fuente de proteínas magras, vitaminas y minerales, como el Omega-3. El Omega-3 ayuda a regular los niveles de colesterol en la sangre y a prevenir enfermedades cardíacas.
Los huevos también forman parte de una dieta baja en carnes rojas. Además de contener muchas proteínas, los huevos contienen grasas saludables y una variedad de nutrientes que tu cuerpo necesita. Los productos lácteos (leche, yogur, queso) también son una importante fuente de proteínas y calcio, y ofrecen una variedad de beneficios nutricionales.