Las pastillas del lavavajillas, con su fórmula especial compuesta por detergente, antigrasa y abrillantador, tienen usos sorprendentes y versátiles que van más allá de su función original. Estos pequeños y potentes aliados de limpieza pueden ser utilizados de maneras poco convencionales para dejar impecables objetos y superficies que nunca hubiéramos imaginado.
8Los resultados te van a sorprender
Una vez que hayas agregado la pastilla, enciende tu freidora y selecciona una temperatura de 90°C. Deja que la freidora funcione durante al menos 10 minutos, permitiendo que la solución limpiadora penetre y afloje la grasa y los residuos de comida adheridos a las paredes y al fondo de la freidora. Durante este tiempo, el agua comenzará a hervir y se formarán burbujas, lo cual es totalmente normal.
Pasados los 10 minutos, utilizando guantes de cocina para proteger tus manos del calor, vacía el agua y desecha los restos de comida que hayan quedado en el depósito. A continuación, procede a fregar la freidora con normalidad utilizando una esponja o paño suave y un detergente líquido suave. Asegúrate de prestar especial atención a las áreas en las que se acumuló más grasa.
Una vez que hayas terminado de fregar, enjuaga bien la freidora con agua tibia y sécala completamente antes de volver a utilizarla. Verás cómo la grasa desaparece y tu freidora se ve reluciente y lista para ser utilizada nuevamente.
