¿Imaginas un error de la Dirección General de Tráfico (DGT) que, en lugar de convertirse en una pesadilla de multas y sanciones, puede ser tu salvación en la carretera? Puede sonar como una fantasía, pero la realidad es que existe una posibilidad real de que un pequeño fallo administrativo te libere de pagar multas por exceso de velocidad.
En este post, te desvelaremos los detalles de este intrigante y poco conocido secreto que podría convertirse en tu as bajo la manga cuando enfrentes infracciones de tráfico. Sigue leyendo para descubrir cómo un error de la DGT puede convertirse en tu aliado inesperado en la carretera.
9Lo difícil que resulta identificar un veloláser
Estos radares tienen características únicas que los hacen difíciles de identificar. Con apenas 50 centímetros de altura y un peso de poco más de 2 kilos, son extremadamente portátiles, lo que permite a la Guardia Civil o la Policía moverlos con facilidad, incluso utilizando un trípode. Además, los veloláser están equipados con baterías que les otorgan hasta cinco horas de autonomía y se pueden controlar mediante WiFi. Una peculiaridad interesante es que, si se colocan en medio del tráfico, pueden multar a los vehículos en ambas direcciones.
Estos radares veloláser tienen una precisión de detección que abarca distancias de entre 15 y 50 metros, y tienen la capacidad de distinguir entre diferentes tipos de vehículos. Sin embargo, su tamaño compacto hace que sea extremadamente difícil para los conductores localizarlos. A pesar de esta dificultad, siempre hay excepciones.
