Congelar alimentos es una práctica común en la gestión de alimentos en nuestros hogares. Sin embargo, no todos los alimentos son aptos para ser congelados, y la elección incorrecta de qué congelar y qué no puede afectar su sabor, textura y calidad nutricional. En esta guía, exploraremos en detalle qué alimentos se pueden congelar de manera segura y cuáles es mejor evitar, brindándote información esencial para sacar el máximo provecho de tu congelador y garantizar la frescura y el sabor de tus alimentos a lo largo del tiempo.
2Una técnica de la que depende nuestra alimentación
La congelación de alimentos es una técnica invaluable en la gestión de nuestras provisiones, permitiéndonos conservar la frescura y calidad de muchos productos. Sin embargo, no todos los alimentos son igualmente aptos para enfrentar el frío del congelador. La explicación detrás de esta diferencia radica en la naturaleza misma de ciertos alimentos, que poseen mecanismos naturales de protección contra la proliferación de bacterias.
Según la experta en seguridad alimentaria y nutricionista Beatriz Robles, hay una serie de características que hacen que algunos alimentos sean ideales para la congelación. Estos incluyen aquellos con alta acidez, baja actividad de agua, contenido elevado de sal, baja cantidad de nutrientes, o que están resguardados por cáscaras o piel protectora. Estos alimentos pueden conservarse en el congelador sin sacrificar su sabor ni sus propiedades nutricionales.