La televisión sigue siendo el medio de entretención por excelencia. A pesar de los avances tecnológicos y las opciones modernas de entretenimiento, dos millones de personas en todo el mundo todavía utilizan una función de televisión que data de 1988. Esta sorprendente estadística demuestra la persistencia de las tecnologías antiguas y la lealtad de los usuarios a pesar de los cambios en el mercado. A continuación, exploraremos los motivos detrás de esta tendencia y los posibles efectos que puede tener en la industria de la televisión.
5La revolución tecnológica de la televisión de 1988 en España
En 1988, llegó a España una tecnología que revolucionó el acceso a la información: el teletexto. En una época en la que internet todavía no había llegado a los hogares y la información se obtenía principalmente a través de periódicos y televisión, el teletexto permitía acceder a más de 800 páginas actualizadas con todo tipo de información desde el propio televisor.
El funcionamiento era sencillo pero innovador: a través del mando a distancia, se escribía un código de tres cifras para acceder a la página deseada. En cuestión de segundos, la información aparecía en la pantalla del televisor, desde noticias de actualidad hasta el estado del tiempo o la programación de televisión.
El teletexto se convirtió en una herramienta indispensable para muchos ciudadanos, especialmente para aquellos que no podían permitirse comprar un periódico todos los días o que no disponían de tiempo para ver los informativos en televisión. Además, gracias a la actualización constante de las páginas, la información estaba siempre al día.
Hoy en día, el teletexto ha quedado en desuso debido a la llegada de internet y la oferta de información mucho más amplia y actualizada que esta ofrece. Sin embargo, en su momento, fue una auténtica revolución que permitió a los ciudadanos acceder a la información de una forma nunca antes vista.
