Bajo el título “BCE: Ahora o nunca” los analistas de la gestora holandesa Robeco han publicado un artículo en el que explican que la ventana para una subida de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE) se va a cerrar pronto, lo que implica que si no hay subida en septiembre no habrá ya margen para subidas en octubre, una idea defendida por muchos otros economistas.
LA SUBIDA ESPERADA
La gestora explica que el Banco Central subió 25 puntos básicos los tipos de interés en la reunión de julio, tal y como se esperaba por la mayoría de los economistas, llevando los tipos de depósito en este ciclo hasta los 425 puntos básicos (desde el -0,5% hasta los 3,75%).
“La inflación sigue bajando, pero todavía se espera que permanezca demasiado elevada por demasiado tiempo”, decía la declaración oficial. Además, señalaba que las decisiones futuras asegurarían que los tipos volverían a niveles suficientemente restrictivos para lograr que la inflación vuelva al objetivo del 2% a medio plazo. Esto, en opinión de los analistas de Robeco, Martin van Vleet, Rikkert Scholten y Bob Stoutjesdijk, confirma que la campaña de subidas de tipos de la entidad está llegando a su final.
El mercado estará atento hoy a la intervención del Banco Central porque el consenso otorga un 42% de probabilidades a otra subida de tipos y un 58% a una pausa, a la espera de una posible subida en octubre. El mercado también descuenta un mensaje duro, con tipos más elevados durante más tiempo y una hoja de ruta política en función de los datos.
EL CICLO DE SUBIDAS DE TIPOS DEL BCE ESTÁ LLEGANDO A SU FIN
La presidenta del Banco Central, Christine Lagarde, lo reforzó en la conferencia de prensa posterior al manifestar que el Consejo de Gobierno había dejado de ser totalmente dependiente de los datos y que tenía una mente abierta para las decisiones que tendrían lugar en septiembre y más allá: podrían subir o parar.
Desde la reunión de julio, la retórica de los responsables del banco central ha repetido esto último, aunque los gobernadores más hawkish todavía esperan una subida de 25 puntos básicos en septiembre. Probablemente se han dado cuenta de que los datos de inflación correspondientes al mes de septiembre lo harán más difícil (tras cualquier pausa en septiembre) para subir tipos en octubre.
Las previsiones de crecimiento económico de la eurozona es probable que continúen con su deterioro
De hecho, los factores técnicos incluyendo los efectos base relacionados con los precios de los viajes y el turismo en Alemania apuntan a una fuerte caída de la tasa de inflación en septiembre. Además, las previsiones para el crecimiento económico de la eurozona es probable que continúen con su deterioro en relación al escenario base predominante.
Por lo tanto, explican los gestores holandeses, sospechamos que es ahora o nunca para que los miembros del consejo de gobierno de la entidad más hawkish consigan llevarse el gato al agua y que se suban los tipos hasta el 4% – para asegurarse contra un escenario en el que la inflación sea más persistente de lo previsto.
¿Y SI HUBIERA UNA PAUSA?
“Si el BCE se decanta por una pausa, esperamos un mensaje muy hawkish, incluyendo la amenaza de que los recortes de tipos de interés no están en el horizonte. En los próximos meses también esperamos más referencias sobre la idea de que mantener los tipos ante una esperada bajada de la inflación (ya) implica un tensionamiento de la política monetaria”, apuntan.
Y en lo que respecta al Quantitative Easing (QE), mantienen la percepción de que las ventas del Programa de Compras de Activos (APP) – las reinversiones fueron suspendidas desde julio – son menos probables que en una parada previa bajo el Programa de Compras de Emergencia (PEPP) actualmente no programada antes de finales de 2024. Pero esta última probabilidad no será discutida antes del cuarto trimestre, dicen.
La tasa repo del BCE volverá a territorio neutral antes de lo que anticipan los mercados
Y por lo que se refiere al precio de mercado, los expertos de Robeco creen que una tasa repo está totalmente descontada para el cuarto trimestre. “Mirando adelante, seguimos creyendo que la tasa de depósito o repo volverá a territorio neutral (que nosotros situamos en torno al 1,75%-2,25%) antes de lo que anticipan los mercados (y el Banco Central Europeo)”.
“De hecho, seguimos preguntándonos si la política de tipos de la entidad se mantendrá restrictiva por muchos años, apear de la caída proyectadas en la inflación”, concluyen.